AKK, la “Merkel bis” que surge en Alemania
▃▃ La Unión Cristiano Demócrata (CDU) alemana optó ayer viernes por el continuismo y, tras 18 años bajo el liderazgo de la canciller Angela Merkel, entregó la jefatura a su leal secretaria general, Annegret Kramp-karrenbauer, pese al fuerte empuje del ala derechista del partido.
AKK, como se conoce a la secretaria general del partido, se impuso por un 51,8% en el congreso de la CDU de Hamburgo, frente al 48,2% del representante del ala derechista, Friedrich Merz, y tras haber quedado descartado en una primera vuelta Jens Spahn, crítico hacia la línea de Merkel.
El nombramiento de AKK, de 56 años, abre las puertas de la cancillería a la considerada como “Merkel bis”, desconocida hace un año en Alemania. Y aumenta también las posibilidades de que Angela Merkel consiga terminar su mandato de canciller en 2021, como así pretende.
Tras el anuncio de los resultados, la mayoría de los miles de delegados presentes en una sala abarrotada del congreso de Hamburgo se levantaron y algunos corearon “¡AKK! ¡AKK!”. Muy emocionada, la elegida se encaminó al podio donde abrazó a Angela Merkel, su mentora.
AKK es madre de tres hijos, y ha hecho casi toda su carrera en Sarre (suroeste). Mientras que sus dos rivales abogan por un giro a la derecha para recuperar a los electores que cambiaron su voto a favor de Alternativa para Alemania (AFD), el partido de extrema derecha que entró hace un año en el Parlamento alemán, AKK pidió mantener “el norte” y proteger los valores cristianos y democráticos de la CDU.
También se defendió de ser una “Merkel bis”. “Soy la que soy”, proclamó.
La CDU necesita más que nunca un nuevo impulso. Ante la presión por la derecha de AFD y de los Verdes alemanes por el centro, la formación solo obtendría entre el 26% y el 28% de los votos, según los sondeos. En las legislativas de septiembre de 2017, consiguió el 33%. Su socio en el gobierno, los socialdemócratas (SPD), atraviesan una crisis aún más grave.