Perspectivas de modesta suba en el PIB para 2019
El estancamiento del nivel de actividad acumula tres trimestres consecutivos
El análisis del nivel de actividad sigue preocupando a pesar que el PIB del tercer trimestre es superior al del mismo período del año pasado en un 2,1%. En perspectiva, mirando hacia adelante, hay que lidiar con tres trimestres seguidos estancados en el mismo nivel, varios sectores de actividad con problemas y un clima general de negocios poco motivado. Igual, es un año electoral donde hay fuertes inversiones previstas en el sector público y también, la perspectiva de que el tipo de cambio se vuelva a apreciar hace pensar que el consumo aportará una ayuda momentánea al crecimiento del 2019. En el contexto que se desarrolla en esta nota, nuestra expectativa de crecimiento para el 2019 es del 1,7%, levantando un poco del actual estancamiento, pero sin cambiar una realidad mediocre. Como referencia, el ritmo tendencial de la economía debería estar próximo al 3,5% anual.
El tercer trimestre fue similar al segundo una vez corregido de elementos estacionales. Al mismo tiempo, el segundo había sido muy parecido al primero con lo que hay tres trimestres en hilera con el mismo PIB. Este estancamiento se puede apreciar en el gráfico superior del cuadro adjunto. El período de estancamiento anterior fue desde mediados del 2014 a fines del 2015.
El estancamiento en el mismo nivel para los tres primeros trimestres del año deja muy poco impacto de crecimiento para 2019. Esa diferencia entre el último dato del año y el promedio, que se suele denominar “arrastre estadístico”, va a ser insignificante. Por lo tanto, para observar crecimiento el año que viene hay que encontrar motores que arrastren al resto y la única carta en el horizonte es la mega-inversión de una tercera planta de celulosa.
Los sectores productores de bienes pueden aportar algo al crecimiento. Por el lado de la producción primaria, la zafra de soja tiene muchas posibilidades de superar la catástrofe de 2017/18 con el impacto negativo del clima. Para la ganadería, aparecen problemas de falta de oferta, en una actividad que está con márgenes muy reducidos. Es posible que los buenos precios internacionales para la producción forestal tonifiquen algo al sector.
En el gráfico de la izquierda en la zona media del cuadro se ilustra la evolución en los tres últimos años de los productores de bie-