El FA cerró con Mujica y Astori
Rodeado de los líderes, Martínez alertó que el país puede “terminar como Argentina”
Daniel Martínez no cerró su campaña solo en el escenario, como había hecho en el último acto antes de la elección nacional del 27 de octubre. Lo hizo rodeado de José Mujica, Danilo Astori, la vicepresidenta Lucía Topolansky, el presidente de Frente Amplio Javier Miranda, los senadores electos, los candidatos a ministros y su compañera de fórmula Graciela Villar, anoche en Florida.
Tras un cortocircuito entre Martínez y Mujica por los dichos del candidato sobre el programa de gobierno, ambos compartieron escenario en un intento por demostrar señal de unidad del Frente Amplio.
No hubo abrazo, sí un saludo frío que se produjo a iniciativa del propio candidato y que consistió en un breve apretón de manos. También posaron juntos para la foto con una bandera uruguaya junto a Villar, quien saludó afectuosamente al expresidente que era ovacionado por el público al grito de “¡Pepe, Pepe!”.
La descoordinación entre los comandos de campaña, las diferentes estrategias desplegadas y la ausencia de los principales líderes habían sido los puntos débiles de una campaña en la que en los estrados solo aparecía el candidato y la vice.
Anoche, el Frente trató de mostrar a un Martínez diferente y rodeado de todos los “pesos pesados” del Frente.
En un discurso leído y con la bandera nacional en sus hombres, el exintendente marcó las diferencias con su contrincante Luis Lacalle Pou, cuestionó a la coalición opositora por “inestable” y llamó a militar hasta el domingo para “ganar la batalla” en el balotaje.
Los principales dirigentes del Frente Amplio lo escuchaban sentados. “Esta es una batalla que se va a ganar porque el pueblo uruguayo salió a la calle a conquistar el voto a voto”, afirmó. A lo que se escuchó en coro: “El pueblo unido, jamás será vencido”.
Sobre el balotaje del próximo domingo, dijo que lo que está en debate es “un futuro con certezas” o el “riesgo de una coalición multicolor que se unió solo para enfrentar al Frente Amplio”.
“No es una coalición estable”, afirmó y en la misma línea ironizó: “Se ve que algunos aprendieron a nadar porque los separaba un océano de diferencias. Lograron sacarse la foto, pero la historia nos demuestra que estas coaliciones no son otra cosa que amores de verano”. Después afirmó: “El herrerismo plantea, como siempre ha planteado, que con achicar el Estado alcanza para que todo mágicamente funcione. El déficit fiscal parecería que fuera la madre de todos los problemas (…) Pensar que achicar el Estado se hará sin el costo fiscal para las mayorías es por lo menos ser ilusos”. Para reforzar la idea, agregó: “Ya saben cómo termina esto, como Argentina o Brasil”.
Según Martínez, achicar el Estado generará “más desocupación, menos ingresos y más riquezas”, en alusión al planteo de ahorrar US$ 900 millones al año para reducir el déficit fiscal. La medida anunciada por Lacalle Pou fue calificada una vez más como “un ajuste salvaje”,
“Estas coaliciones no son otra cosa que amores de verano”, dijo el candidato.
que afectará áreas como la salud, la seguridad y la vivienda.
El candidato oficialista dijo que, pese a que se piensa mantener los Consejos de Salarios, en un eventual gobierno de Lacalle Pou se convocarán solo para fijar salarios mínimos, no se negociará por rama. “Nada que ver con la negociación colectiva que ha permitido hacer crecer el salario de los trabajadores, como nunca en la historia del país”, aseguró.
Martínez concluyó que, si gana Lacalle Pou, “el salario no va a crecer o va a crecer menos que la inflación” y a su vez aseguró que “las jubilaciones se van a achicar”. Como otras veces, se refirió a la ley de urgente consideración como “un cheque en blanco” y aseguró que Lacalle ve con “buenos ojos” la instalación de cupos para el ingreso a la Universidad.
“No nos gusta apostar al miedo, no nos gusta, pero por todo lo que hemos dicho y ver lo que se repitió en Argentina, decimos: el futuro en manos de Lacalle sí que nos da miedo, nos da miedo de perder los avances que hemos conquistado”, aseguró.
En tanto, defendió su propuesta para crear 90.000 empleos en cinco años, la cual dijo no es demagógica y la comparó a la del senador electo Juan Sartori, quien en la campaña hacia las internas proponía crear 100.000 puestos. “Me causa gracia cuando algunos se sorprenden como si estos números salieran de un repollo, de un repollo podría salir alguno que vino de afuera sin conocer el Uruguay y sin saber cómo. En nuestro caso fueron cientos de técnicos que colaboraron para analizar los instrumentos para que esto fuera posible”, explicó.
“No son posturas oportunistas de último momento, como se trata de convencer. Claro que nos preocupa la seguridad y el empleo”, aseguró el candidato, quien afirmó que se hace cargo de sus propuestas. Casi al final de su discurso, Martínez nombró a “grandes hombres” como Wilson Ferreira y José Batlle y Ordóñez y el diputado Fernando Amado exhibió una fotografía del expresidente colorado. “Estamos seguros que muchos batllistas de ley y wilsonistas nos van a votar el 24 de noviembre”, subrayó. Y terminó así: “A seguir militando de las mil formas posibles”.