Un sonido que sana a la naturaleza
Un idea creativa uruguaya que comienza a recorrer el mundo y logra reconocimientos
Como un pequeño aporte a las próximas generaciones en un mundo amenazado por el cambio climático. Así ha nacido una idea innovadora uruguaya disruptiva, concebida para los vehículos híbridos y eléctricos de Toyota y que está llamada a revolucionar al planeta gracias a un dispositivo de sonido que no solo alerta a los peatones, sino que también ayuda a reconstruir la vegetación dañada por la contaminación.
“Los estándares de vida a nivel mundial se multiplicaron: la prosperidad, el conocimiento, la expectativa de vida. Pero también siguen existiendo preocupaciones, como el clima y el medio ambiente. Los avances del desarrollo tuvieron su costo en ese sentido y hoy vemos que se repiten inundaciones, tornados, sequías, cambios de temperatura; inclusive la temperatura oceánica de Uruguay está 2° por encima del promedio del calentamiento global”, afirmó a El País Alejandro Curcio, presidente de Grupo Curcio Capital y la empresa Ayax, representante de Toyota en Uruguay.
EMISIONES. La industria automotriz ocupa los primeros planos en este tema de la contaminación ambiental, porque todo lo que es movilidad genera dióxido de carbono, que incrementa los gases de efecto invernadero.
Ante una decisión de la Unión Europea, que obliga a la industria automotriz a incorporar un sonido en todo vehículo híbrido y eléctrico por motivos de seguridad vial a partir del próximo año, Curcio asumió un reto aún mayor que ya ha comenzado a circular en el mundo.
INVENCIÓN. Junto a la firma The Electric Factory, el grupo liderado por Curcio se planteó la posibilidad de inventar en Uruguay un sonido positivo para el medio ambiente y como complemento ideal para los motores eléctricos de Toyota. Se trata de tecnología y desarrollo 100% local para aplicar en el mundo, en el que también participó el ingeniero sonidista Guzmán Calzada, que trabaja en la Universidad del Rey en La Haya (Holanda).
Al tomar como base sendos estudios académicos realizados en Estados Unidos, se concluyó que existen ciertos rangos de frecuencia sonoras que sanan y además estimulan el desarrollo de las plantas. Por otro lado, el sonido emitido por el dispositivo bautizado como Hy ocupa un ancho de banda muy pequeño en el espectograma sonoro del ambiente, lo cual contribuye a disminuir la contaminación sonora y facilita la comunicación entre las especies. A partir de la investigación científica, el Grupo Curcio Capital y The Electric Factory,
liderado por Juan Ciapessoni, lograron implementar la ingeniería que permite reunir la frecuencia con un sonido que sana a la vegetación, a través de un software que hace una lectura inteligente del vehículo híbrido o eléctrico, emitiendo una señal acústica que cumple con las normas en Europa y Estados Unidos. “Diversos estudios demostraron que ciertos rangos de frecuencias generan un impacto desde el punto de vista epigenético en el ADN de las plantas, que les permite restablecerse. El
ADN vuelve al estado anterior al desgaste por la contaminación. Las plantas están sanas y crecen más”, explicó Curcio.
Así, del encuentro entre la ciencia y la vocación emprendedora, nació el proyecto Hy. Esta innovación cumple con tres objetivos básicos: disminuir la huella de dióxido de carbono, impulsar tecnologías que puedan proteger el medio ambiente y desarrollar un modelo de proyecto país que genere sinergia entre el sector público y privado.
El proyecto, que combina sustentabilidad, movilidad y tecnología, ya recibió el apoyo del Estado al ser declarado de interés nacional por el instituto Uruguay XXI.
A nivel local, el dispositivo sonoro fue implementado en la flota de vehículos híbridos de la empresa de servicios de “carsharing” del Grupo Curcio Capital y también comenzó a ganar terreno fuera de fronteras.
Tecnología y desarrollo local para implementar a nivel mundial en múltiples usos.
HOJA DE RUTA. El entrevistado adelantó que en 2020 el dispositivo Hy será incorporado en los vehículos híbridos y eléctricos de Toyota en Argentina y Brasil, para luego avanzar hacia el resto de los países en América Latina.
Al igual que Toyota, que en sus orígenes comenzó como una compañía textil, la innovación está arraigada en el ADN de Ayax. Su capacidad disruptiva estuvo presente a lo largo del tiempo. En el año 1971 fue el segundo distribuidor independiente del mundo en fabricar la Toyota Hilux después de Japón. Todas las camionetas Toyota Hilux que circulan en la región, en tanto, actualmente lucen en sus asientos el tapizado de cuero procesado en la planta industrial que dirige Curcio en Uruguay.
La hoja de ruta del presidente del Grupo Curcio Capital no descarta que en un futuro próximo todos los vehículos híbridos y eléctricos que salgan de las fábricas de Toyota utilicen este dispositivo desarrollado en Uruguay.
“Nuestra invención trasciende al sector automotriz de forma trasversal por sus múltiples usos, como es el caso de implementarlo en un tractor. Hemos hecho algo que favorece al planeta. Y, si se hace entre todos desde la colaboración, vamos a lograr mejores resultados aún”, concluyó Curcio.