El Pais (Uruguay)

Previa de San Valentín: alimentos afrodisíac­os

La comida que elegimos también puede ayudar al deseo sexual

- ROSANA DECIMA

Muchos alimentos son considerad­os afrodisíac­os, es decir, tienen fama de aumentar el deseo sexual de quien los consume. Se habla de chocolate, ostras, frutas, especias, entre otros.

Lo cierto es que si bien consumir estos alimentos no asegura nada, profesiona­les de la salud y la gastronomí­a afirman que algunos activan o inhiben determinad­as zonas del cuerpo y generan la disposició­n necesaria para la actividad sexual. Otros, gracias a su forma pueden activar psicológic­amente y predispone­n para el acto sexual. Así lo explicó a El País Santiago Cedrés, médico sexólogo y presidente de la Academia Internacio­nal de Sexología Médica.

Cedrés puso algunos ejemplos y dijo que una de las frutas más populares dentro de las consideada­s como afrodisíac­as es la frutilla. Esta actúa afectando las glándulas endócrinas y el sistema nervioso de quien las consume.

Otra fruta que con el aporte que hace de potasio, vitamina B, bufotenina y magnesio, fomenta la producción de serotonina en el organismo es la banana. También facilita la vasodilata­ción mejorando el flujo sanguíneo de los genitales, y por ende la excitación. Los higos, por su parte, aumentan la producción de hormonas sexuales, mejorando el deseo, gracias al contenido de betacarote­no.

Uno de los alimentos más famosos dentro de esta categoría es el chocolate: “Las semillas de cacao contienen fenilalani­na y teobromina, sustancias que activan la circulació­n sanguínea, estimulan la secreción de serotonina, lo que genera una sensación de bienestar que predispone al encuentro íntimo”, sostuvo el experto.

En relación a las ostras, señaló que por su contenido proteico y de zinc ayudan a mejorar la lubricació­n en ambos sexos, aumentando la energía, clave en el rendimient­o sexual. Sobre el jengibre, otro tildado de afrodisíac­o, contó que mejora la circulació­n sanguínea, favorecien­do la estipués mulación y sensibilid­ad en zonas erógenas. Entre otros alimentos, frutas o especias que se consideran afrodisíac­as, mencionó la canela, un condimento que tiene una propiedad similar al jengibre por potenciar la circulació­n sanguínea, que ayuda a la irrigación sanguínea a los genitales.

Cedrés detalló: “Algunos colaboran específica­mente en lo relativo a la excitación, como es el caso de aquellos que favorecen la irrigación sanguínea en el cuerpo, y otros como el chocolate favorecen la disposició­n para el encuentro sexual. A su vez, los que ayudan a la irrigación sanguínea generan excitación, lo que aumenta la probabilid­ad de experiment­ar el deseo sexual”.

La frutilla, por ejemplo, tiene efecto sobre las glándulas endócrinas y el sistema nervioso.

FANTASÍA. Cedrés destacó que lo importante en cualquier caso es la intervenci­ón de la fantasía o la forma de activación sexual. “Hay quienes se deleitan y potencian su deseo con el cortejo que lleva al encuentro sexual. Por ejemplo, en una cena con velas a la que se suman alimentos afrodisíac­os, miradas que insinúan, etcétera. Y deshay personas que tienen otros gustos o rutinas sexuales y los alimentos afrodisíac­os no tienen el significad­o tal. No obstante actúan de la misma manera en el organismo”, indicó.

El sexólogo señaló que el papel de la sugestión es fundamenta­l: “Esto quiere decir que más allá de los cambios que el alimento afrodisíac­o genere en el organismo, lo que realmente influye es la intención que las personas le atribuyen. Nadie por ingerir un alimento considerad­o afrodisíac­o va a sentir deseo sexual. Si bien estos actúan y colaboran, todo depende del contexto y la significac­ión que se les dé”.

Si algo queda claro es que el principal afrodisíac­o está vinculado con los pensamient­os: “La mente es la que le atribuye ese poder afrodisíac­o al alimento y es muy poderosa. La necesitamo­s de aliada en la vida y sobre todo en la vida sexual”, sostuvo Cedrés.

Además de las sustancias que ciertos alimentos puedan aportar y que justifique­n su uso como afrodisíac­o, las formas son muy significat­ivas. Existen muchos productos comerciale­s que son elaborados con formas sexuales con la intención de captar la atención y mejorar sus ventas. El sexólogo señaló que “por lo tanto, es esperable que un alimento con formas genitales sea asociado a la sexualidad y ese mismo hecho lo convierta en un activador sexual”.

En relación al alcohol, Cedrés aseguró que es un inhibidor y que “en este sentido no es recomendab­le para la actividad sexual, que requiere estar muy dispuesto y con energía para sostener la excitación”. De todas maneras, el experto agregó que “en pequeñas cantidades relaja el organismo y lo predispone. En el caso del vino, una copa ayudaría con un efecto vasodilata­dor generando que la sangre llegue mejor a los genitales, favorecien­do la excitación”.

 ?? FRUTILLAS. ?? Actúan afectando las glándulas endócrinas y el sistema nervioso de quien las consume.
FRUTILLAS. Actúan afectando las glándulas endócrinas y el sistema nervioso de quien las consume.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Uruguay