La cuarentena despejó los cielos
Liceales detectaron cinco asteroides y más de 350 meteoros desde sus hogares
Liceales detectaron cinco asteroides y más de 350 meteoros desde sus casas.
Te atrapa”. Así de sencilla fue la respuesta de Raúl Salvo. Hablaba de asteroides, meteoros, estrellas, agujeros negros. Él, astrónomo de profesión, no hablaba exclusivamente de su pasión, sino la de estudiantes de siete liceos que, a pesar de tener las clases suspendidas por la pandemia por COVID19, han seguido sus investigaciones en la materia. Tanto así que en un mes y “desde la casa”, han hecho cinco detecciones preliminares de asteroides y más de 350 reportes de meteoros al conectarse de manera remota al Observatorio Astronómico de Montevideo (OAM).
Este es una institución abocada a la enseñanza y divulgación de la astronomía y la observación didáctica y científica ubicada en el edificio del Liceo IAVA donde, además, funciona un museo declarado Patrimonio Histórico Nacional. Fue inaugurado en 1927 y es el Observatorio X50 para la Unión Astronómica Internacional.
Respecto a esos cinco asteroides, Salvo dijo a El País: “Son históricos porque fueron descubiertos durante la cuarentena a través de conexión por internet”.
El OAM participa desde hace varios años en el proyecto internacional IASC (International Astronomical Search Collaboration) de búsqueda de objetos de la zona del Cinturón Principal de Asteroides (una región entre las órbitas de Marte y Júpiter) y eventualmente objetos NEO’S (objetos cercanos a la Tierra) pero que, hasta ahora, requería presencialidad.
Este es un programa por que el que se ayuda a los expertos a detectar esos cuerpos en sus imágenes. “Como hay mucha cantidad de objetos en el cielo desde aviones a aves hasta cuerpos celestes-, los astrónomos profesionales piden ayuda a nivel mundial a estudiantes”, apuntó.
Esos cinco asteroides no son los primeros observados por primera vez por liceales uruguayos; hay otros tres con designación provisional: 2015 FL99, 2015 FR68 y 2015 FP11; y dos anteriores: 2012 HC10, 2014SK329. Pero los nuevos fueron registrados en condiciones técnicas muy especiales. Las computadoras del OAM fueron instaladas en la casa de un docente y los jóvenes se conectan de forma remota para trabajar en el proyecto.
¿Por qué se dice que es una detección preliminar y hay otros tres con designación provisional?
(ver recuadro). Reclamar la autoría de una observación de un objeto puede llevar años. “Si tenemos suerte y otros observatorios del mundo los registran y los miden en estos días podremos transformar la designación en provisional”, explicó.
Ahí no termina el trámite. La provisionalidad lo coloca en un catálogo a la espera de un próximo pasaje, lo cual puede tardar dos o tres años. “Si es recuperado y medido nuevamente, allí podrá tener un nombre uruguayo y el descubrimiento será definitivo”, agregó.
Entre los miles de asteroides descubiertos hasta el momento, más de 20 llevan nombres que homenajean al país. Salvo recordó a Vaimaca (68853.2002 HA9) y
Guyunusa (73342.2002 JX115), dos asteroides descubiertos por el astrónomo Gonzalo Tancredi en 2002 y bautizados como los últimos charrúas. Fueron los primeros descubiertos por un uruguayo desde Uruguay.
“Otro liceo ya tiene provisionalidad. Pero estos hallazgos se dieron en cuarentena y queremos resaltarlos porque no es menor que los gurises se estén conectando y manteniendo el entusiasmo; ahora hay un interés mayor que cuando había presencialidad”, comentó Salvo. Y añadió: “No va a parar esto. La búsqueda de asteroides está cada vez más en auge”.
Hace unas semanas se viralizó el pasaje de 1998 OR2, de unos dos kilómetros de ancho, que pasó a una distancia que los astrónomos definen como de “acercamiento”: a unos 6,3 millones de kilómetros de la Tierra. Eso es más de 16 veces la distancia que nos separa de la Luna.
FUGACES. A los cinco asteroides se sumaron más de 300 reportes de meteoros y bólidos (estos son meteoros muy brillantes, caracterizados por parecer una bola de fuego y crear una huella luminosa). En concreto, 357 reportes que se repartieron entre siete liceos y 27 participantes. Esto se logró a través del acceso a la cámara Allsky ubicada en un observatorio europeo instalado en Chile.
Esa cámara captura el cielo durante toda la noche. “A veces sus imágenes quedan dormidas; nadie las usa”, apuntó Salvo.
No obstante, los estudiantes analizan cada una para que nada pase por alto. “Lo hacemos como introducción a la ciencia y en el manejo del software pero quizás hasta dé algún rédito científico, por ejemplo, por contabilización de estrellas fugaces. No es el objetivo aunque no lo descartamos”, añadió.
Lo que sí es un objetivo es contar con una red de cámaras Allsky en el país. Esta tecnología permite grabar o fotografiar todo el cielo de forma continuada. Esta es una intención de los observatorios profesionales y el Departamento de Astronomía de la Facultad de Ciencias, pero los observatorios liceales están en tratativas para que los estudiantes puedan trabajar con sus datos.
“Una lluvia de meteoros tiene el coletazo de que si detecta la órbita se puede ir a buscarlos (si caen a la superficie terrestre) cuando tengamos los registros”, indicó Salvo.
La pandemia paralizó un proyecto de adquisición e instalación de un telescopio robótico en el OAM más moderno del actual, pero se retomará en los próximos meses. “Va a trabajar un poco más alto y va a preparar a toda la gurisada que ya está familiarizada con las cámaras y las imágenes”, dijo el director.