El BID y la CAF enviarán unos US$ 1.000 millones
Ambos aprobaron créditos por US$ 350 millones cada uno
▃▃DOS organismos internacionales aprobaron en las últimas horas créditos por unos US$ 700 millones para dar apoyo financiero al gobierno uruguayo ante la pandemia del coronavirus.
Por un lado, la CAF —banco de desarrollo de América Latina— aprobó el martes un “préstamo de US$ 350 millones en favor de Uruguay para apoyar financieramente las medidas de emergencia adoptadas por el gobierno para mitigar los efectos del coronavirus en los sectores económicos, financieros y sociales, y en la calidad de vida de las personas”, indicó el organismo en un comunicado.
“Estos fondos complementarán las iniciativas fiscales que está llevando a cabo el país y reforzarán las medidas económicas contracíclicas encaminadas a mitigar los efectos de la crisis en los sectores económicos más afectados por la pandemia”, añadió.
El presidente ejecutivo de CAF, Luis Carranza señaló que “con estos recursos financieros esperamos apoyar rápida y eficientemente al gobierno de Uruguay en sus esfuerzos por mitigar el impacto que la pandemia del COVID-19 está generando en la economía y en los colectivos vulnerables del país”.
El pasado 5 de mayo, CAF había otorgado un crédito por US$ 50 millones.
Por su parte, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) aprobó ayer un “crédito de US$ 350 millones para el fortalecimiento de la política pública y gestión fiscal para la atención de la crisis sanitaria y económica causada por el COVID-19”, según un comunicado del organismo. “Adicionalmente, se están preparando otras cuatro operaciones que permitirán al país contar con otros US$ 311 millones a inicios del tercer trimestre de este año”, agregó.
Esos cuatro créditos “servirán para: “apoyar la reactivación económica mediante el fortalecimiento del Sistema Nacional de Garantías (Siga) para promover el acceso de las micro, pequeñas y medianas empresas al crédito en condiciones favorables; atender a poblaciones vulnerables que se vieron fuertemente afectadas por la crisis socioeconómica y sanitaria; avanzar en la digitalización de los servicios de salud y la historia clínica electrónica; incrementar los instrumentos financieros que dispone el país para enfrentar pandemias futuras y posibles desastres naturales”, explicó el BID.
“Los recursos de estas operaciones se irán utilizando en función de las necesidades de corto y mediano plazo generadas por el impacto de la pandemia”, añadió. Desde la llegada del coronavirus, el BID ya había desembolsado US$ 1.050 millones en créditos contingentes (ya estaban aprobados desde hace años y el gobierno es el que decide cuándo los desembolsa).
“La versatilidad del BID y su rápida respuesta con nuevos instrumentos flexibles concebidos para atender las necesidades de los países en estas circunstancias tan particulares, nos permiten contar con un apoyo relevante y oportuno para afrontar la pandemia y sus consecuencias”, destacó la Ministra de Economía y Finanzas, Azucena Arbeleche.
El BID destacó que entre los US$ 1.050 millones ya desembolsados y los nuevos créditos aprobados y en preparación “apoyará este año a Uruguay con más de US$ 1.700 millones (...) para hacer frente a la emergencia sanitaria del COVID-19 y sus impactos”.