Menos faena, más eficiencia
El INAC actualizó los datos anuales del sector cárnico, en el registro del “año agrícola” (julio-junio), que muestran con claridad los importantes cambios de los últimos años. Por un lado, la incidencia de la cuota 481 y las exportaciones en pie de terneros de los años 2017 y 2018 llevaron a una fuerte caída en la edad promedio de faena de novillos (gráfica), lo que implica una mayor eficiencia en la base productiva ganadera. Esto necesita confirmarse en los próximos años, en los que se espera un aumento en la actividad frigorífica, después de los últimos años de caídas (y pérdidas significativas en el negocio frigorífico).
En esa perspectiva, hay datos alentadores pero también amenazas: Uruguay ha logrado sortear la pandemia y mantiene un potencial de producción innegable. El reciente aumento en el precio de la soja puede moderar la transición de muchos campos de la agricultura a la ganadería, pero no en forma drástica. Preocupa más el escenario de mercados: la cuota 481 se achica y el acuerdo con la UE se aleja. La dependencia de China es cada vez mayor (gráfica) y puede acentuarse con los problemas de la fiebre porcina (que ahora apareció en Alemania).
Ante este escenario, el gobierno se acerca a EEUU con el objetivo de ampliar mercados, entre ellos sumar más cuota cárnica. Las 20.000 toneladas lucen escasas para la capacidad exportadora del Uruguay.
En los años que vienen se espera aumento en la faena