Heber supera ciclón parlamentario
El ministro de Transporte y Obras Públicas presentó un plan ambicioso y zafó de recortes
El ministro de Transporte y Obras Públicas, Luis Alberto Heber, se sentía “en medio de la tormenta”. “La pandemia ha agravado la situación. No es lo mismo la batalla presupuestal con pandemia que sin pandemia”, aseguraba en julio en radio Universal. Aunque la situación sanitaria se agravó durante los meses siguientes, Heber hizo valer las tres décadas de experiencia en pujas parlamentarias y logró salir de la tormenta sin recortes en el presupuesto de su cartera, un logro nada despreciable si se miran los antecedentes.
Los fondos para obras públicas suelen ser los primeros damnificados en tiempos de crisis. El lunes, en el primer día del debate en el plenario del Senado, Óscar Andrade planteó que “la historia dice que lo que se recorta primero” en situaciones críticas es la inversión en “vivienda y obras públicas”. El senador comunista recordó que la ejecución del presupuesto en vivienda durante el gobierno de Jorge Batlle no superó el 60%.
Andrade cuestionaba así la posibilidad de que el Poder Ejecutivo se haya asegurado (mediante los artículos 6 y 7) de limitar las partidas ya aprobadas por el Parlamento si se cumplen ciertas circunstancias. En definitiva, criticaba la chance de un “segundo recorte”, como lo llama el Frente Amplio.
Más allá del planteo de fondo, lo cierto es que el Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP) suele ser un manantial al que legisladores sedientos de fondos recurren para reforzar otros sectores. “A Transporte le bajás un puente o unos kilómetros de carretera y tenés para repartir, porque un kilómetro de ruta cuesta US$ 1 millón”, dijo el diputado nacionalista Gonzalo Mujica.
La Cámara de Representantes aprobará el jueves definitivamente la ley que marcará el rumbo del país por los próximos años. A pocos días de levantar la mano, Mujica recuerda que hace meses le dijo a Heber: “Vos sos una víctima usual de los recortes pero yo voy a defender el presupuesto de Transporte, porque está bien”. El ministro también fue elogiado en comisión y en el plenario por legisladores opositores, que destacaron que su plan quinquenal incluía especificaciones ruta por ruta, obra por obra.
Para Mujica, la clave del logro de Heber estuvo en que propuso “infraestructura productiva”, que genera mano de obra, y en estar focalizada al norte del Río Negro, una región a la que la coalición considera postergada en este asunto. Mientras, al sur se sentirá el impacto por las obras de UPM.
EMBATE. La posibilidad de instalar nuevos peajes y una suba no decretada en el precio generaron críticas de la oposición contra Heber. “Vamos a ir despacio con el tema de los nuevos peajes”, dijo el ministro a El País.
Durante la negociación parlamentaria, Heber tuvo que resistir otros embates. El senador Guido Manini Ríos, líder de Cabildo Abierto (CA), propuso sacar fondos del MTOP para financiar becas universitarias y aumento salarial para soldados y oficiales.
Heber respondió que quizá los militares podrían reparar la caminería rural, lo que es competencia de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP). La pulseada se saldó con más dinero para becas y salarios militares, como pedían CA y otros partidos, y más también para el MTOP, en concreto $ 20.000.000 para financiar obras directas y convenios de la Dirección de Arquitectura.
Los fondos que respaldan las partidas extras que asignó el Parlamento provienen principalmente del inciso Partidas a Reaplicar, una suerte de bolsa para imprevistos.