Las carnes uruguayas ganan espacio en el mercado “Halal”
Certificadora Is Eg Halal pretende habilitar 18 empresas cárnicas locales en los próximos seis meses. Ya se aprobaron las primeras cuatro
Por casi media década, Uruguay no exportaba productos bovinos a Egipto. Una de las limitantes que enfrentaba era la certificación Halal, que se traduce como “permisible” y es el proceso de faena de un animal de acuerdo con los ritos establecidos en el Corán. Muchas comunidades musulmanas, incluyendo Egipto, requieren que sus alimentos importados sean certificados Halal antes de ingresar al país. Hasta ahora, este requerimiento representaba un obstáculo para las exportaciones de Uruguay.
La certificadora Is Eg Halal, una sociedad anónima con el gobierno de Egipto como uno de sus accionistas, es la única entidad autorizada por dicho gobierno para certificar exportaciones Halal que ingresan a ese país desde cualquier parte del mundo. Habiendo establecido su casa matriz latinoamericana en Uruguay hace un año y medio, la certificadora aprobó las cuatro primeras plantas uruguayas: Frigorífico Tacuarembó, Frigorífico Colonia (ambos pertenecientes al grupo Marfrig Global Foods), Breeders and Packers Uruguay (BPU Meat) y Henil S.A. (tripería).
“Nuestra meta es aprobar 18 frigoríficos en los próximos seis meses”, dijo Wael Hana, Presidente de Is Eg Halal. El fundador de la certificadora en 2017 aseguró que la fase uno es certificar para Egipto. En la fase dos la certificación se expandirá hacia otras regiones con gran demanda Halal. La certificadora Is Eg Halal confía en que los productores uruguayos de carne puedan abastecer esa demanda.
Hana explicó que la certificadora se instaló en Uruguay porque “es el país más estable y con menos niveles de burocracia en América Latina”. Y agregó: “Uruguay tiene un gran potencial para conseguir relaciones comerciales estables y positivas”.
Por otra parte, consideró a Uruguay como “amigable” para inversores extranjeros y con varias áreas “zonas libres”. Adicionalmente, la presencia de Uruguay en el Mercosur acompañado de su ubicación geográfica entre dos grandes productores de carne Halal como Argentina y Brasil, genera beneficios comerciales.
La certificación es considerada clave en el desarrollo exitoso de la industria Halal, aunque la industria enfrenta el problema de la existencia de diferentes estándares de esta. La falta de un estándar Halal global es un problema recurrente. Esa es la razón por la que la República Árabe de Egipto tomó la iniciativa de otorgar derechos exclusivos a Is Eg Halal para asegurar una certificación unificada.
Egipto es uno de los más grandes importadores de carne del mundo. Hana mostró que en los últimos 18 meses ese país importó más de 17.000 contenedores de carne y pollo desde Latinoamérica.
POTENCIAL. Desde 2019, el valor total de los productos que certificó Is Eg Halal superó los US$ 1.000. Egipto tiene 86 millones de musulmanes que son potenciales consumidores de muchos de los productos que produce Uruguay.
En 2020 Uruguay y Paraguay significaron el 1% aproximadamente de las exportaciones desde Latinoamérica a Egipto. Para un país históricamente conocido por ser un gran productor de carne, Uruguay tiene mucho para ponerse al día en este mercado.
AVANCE. Por primera vez desde 2012, Uruguay retomó sus exportaciones de carne hacia Egipto. En un acuerdo que incluye cortes certificados de Angus, la mayor calidad disponible. Esto es solamente el primer paso para desarrollar el mercado de productos Halal uruguayos.
“Uruguay tiene una gran capacidad para incrementar sus exportaciones hacia el Medio Oriente y fundamentalmente para Egipto, que es uno de los importadores de carne más grandes del mundo”, dijo el presidente de la certificadora egipcia instalada en Uruguay. Desde que se firmó el Tratado de Libre Comercio (TLC) entre el Mercosur y Egipto en 2010, las relaciones comerciales crecieron significativamente. En 2019, el Mercosur representó el 39% del total de las importaciones egipcias. Los productos que ese país importa desde el Mercosur son cereales, carne, minerales metales, semillas, grasa animal y aceites cárnicos, representando más de la mitad del volumen exportado. A cambio, las exportaciones de Egipto hacia el Mercosur fueron por US$ 475 millones (FOB). Los productos más comunes exportados hacia el Mercosur son fertilizantes, plásticos y vegetales. Hana recordó que las exportaciones desde Uruguay a Egipto representaron solamente el 1% de las realizadas por el Mercosur el año pasado, mientras que Brasil y Argentina representaron un 64% y 34%, respectivamente. Actualmente, Hana, Egipto y su equipo en Is Eg Halal, sostienen que están buscando soluciones para aumentar ese volumen. Una de esas soluciones podría ser el interés en adquirir tierras en Uruguay para aumentar la producción. La certificadora confía en que no solamente va a incrementar las exportaciones sino que además creará oportunidades de empleo en el país.
Hana recordó que el presidente Luis Lacalle Pou implementó incentivos tarifarios para que ciudadanos extranjeros puedan tramitar la residencia en Uruguay. Esto también motiva a Is Eg Halal a invertir en el futuro de su negocio en el país. Uruguay es un centro de libre comercio y Hana considera que la posibilidad de establecer relaciones comerciales entre Uruguay y Egipto será beneficioso para ambos países.
MERCADO HALAL. Mientras que Uruguay no es una comunidad musulmana, el mercado de productos Halal tiene un enorme potencial para su economía. La población musulmana representa aproximadamente el 25% de la demografía mundial y es una parte significativa del mercado global de consumo. Es por eso que Is Eg Halal busca establecer una cadena de valor real y sincera con productores uruguayos para que el país pueda competir en el creciente mercado global.
Primariamente influido por una población musulmana creciente en todas partes del mundo, los análisis de la consultora AT Kearney proyectan que el mercado Halal iba a exceder US$ 2.5 billones a finales del 2020. En comparación, los capitales de Apple y Amazon representan US$ 2 billones.
Administrar una certificación Halal derecha es ideal para las naciones musulmanas. Como Is Eg Halal y Egipto, otros países han optado por tener una sola entidad que se encargue de todo el proceso de certificación. Mientras que la competencia en los negocios siempre se describe como “positiva”, la industria de la certificación Halal se comporta diferente. Malasia fue el primer país en tener una sola entidad para regular su certificación Halal.
Jabatan Kemajuan Islam Malaysia, (JAKIM) el certificador Halal de ese país, aumentó estándares y redujo problemas asociados a otros certificadores Halal. Con el mercado global que se espera exceda billones de dólares, estandarizar y regularizar los productos Halal se está convirtiendo en una necesidad. Tener una entidad gubernamental supervisando la certificación Halal aporta efectividad, control de calidad y estándares de inspección. Es considerada ideal comparado con la alternativa de tener empresas privadas individuales, asociadas con mezquitas locales u otras organizaciones islámicas para manejar el proceso de certificación. La visión de Hana es crear un estándar Halal de alta calidad y directo. Considera que Uruguay puede ayudar a la consultora que preside y Egipto a cumplir con este objetivo. La cooperación entre ambos países abre nuevas oportunidades.
Certificadora se instaló en Uruguay “por ser el país más estable y con menos burocracia de la región” . No está descartada, a futuro, la compra de tierras para aumentar la producción local.