GOL INSÓLITO DEL GOLERO DE VILLA ESPAÑOLA
En la hora tiró un centro de la media cancha y se le coló a Dawson: 1-1.
Los científicos pueden ser muy buenos en lo suyo, pero no siempre tienen por qué tener capacidad para comunicar. De todos modos, Internet y las redes sociales se han convertido en una eficiente vía para que muchos académicos aporten información y se comuniquen con la población. Pero también es una herramienta riesgosa. Al igual que sucede con Gorka Orive en España, en Uruguay Julio Medina (director de la Cátedra de
Enfermedades Infecciosas) es uno de los científicos que más utiliza las redes, a veces con más de un tuit por día.
A nivel global un científico que se hizo muy famoso, casi una estrella de las redes sociales, es el epidemiólogo Eric Feiglding, quien tiene 529.000 seguidores y el año pasado polemizó con el gobierno mexicano, cuando publicó que en ese país había más de 50% de positividad. “Estoy llorando por México”, escribió. Sin embargo, algunos de sus colegas, incluso quienes han compartido trabajo con él en Harvard, lo han criticado por sus dichos públicos. Ha sido calificado como un “charlatán” y “un tipo sin ningún tipo de antecedente”, según reseña Infobae, entre otros portales.