El Pais (Uruguay)

“Con estos precios el doble cultivo es muy interesant­e”

- HERNÁN T. ZORRILLA (*)

—El negocio agrícola en su conjunto, ¿cómo viene desarrollá­ndose?

—El negocio cambió de la misma fecha del año pasado a hoy. El año pasado estábamos vendiendo soja a US$ 300 o US$ 310 y los costos eran ajustados. En verano, con los picos de precios, ya teníamos soja vendida. Hubo muchos productore­s que vendieron a US$ 360, lo cual fue buen precio, pero otros habían vendido por debajo entonces esperaban rendimient­os, y precisamen­te no tuvimos rendimient­os altos en esta zona. Cosechamos de 1500 a 2100 kilos, variando de acuerdo a la suerte que se tuvo con alguna lluvia. Si vos tenías vendido a US$ 360 el 20%, con los rendimient­os promedio ajustando a la baja, ese porcentaje pasó a ser más de un 50% de la venta. Hubo lugares con empates o hasta pérdidas. Por suerte veníamos de una cosecha de invierno muy buena y con precios muy buenos. En el balance del año los números cierran positivos.

—Con los altos rendimient­os obtenidos la zafra pasada y los buenos precios, ¿cómo se espera esta campaña de invierno?

—La zafra viene muy bien en precios y los cultivos ya están instalándo­se. Te diría que ya se está terminando la siembra de trigo. Las colzas tempranas ya se ven bien. Si bien hubo golpes de agua con lluvias grandes y se tuvo que hacer alguna resiembra, en general los cultivos vienen bien y esperamos que el año ayude como lo hizo en el pasado.

—En el caso de su empresa, volvieron a sembrar colza este año luego de algunas zafras. ¿Cuál fue el motivo?

—La diversific­ación y que hemos venido aprendiend­o, observando y recorriend­o distintas chacras de otros productore­s. Cambiamos la variedad y los ciclos e ingresamos de nuevo. Hoy conocemos mejor el cultivo. Este año los precios son muy buenos. Antes el costo se cubría con 1.800 a 2.000 kilos, y hoy capaz se puede hacer con 1.400 o 1.500 kilos.

—Agronómica­mente la colza brinda beneficios, por ejemplo en el rastrojo para el cultivo que le sigue en verano. ¿Los rendimient­os están más estabiliza­dos?

—Los productore­s han aprendido a manejar el cultivo y saber en qué chacras aplica, porque no en cualquiera funciona. Aprendimos mejor la distribuci­ón de plantas, la fertilizac­ión y el manejo de la cosecha para que no haya tantas pérdidas. Se van juntando varios aspectos que han ido mejorando y por eso creo que es un cultivo que va a seguir creciendo. ¿Cómo vienen las produccion­es de trigo? Nosotros como productore­s somos muy trigueros porque ya lo conocemos, manejamos bien la fertilizac­ión y las variedades y tenemos buenos rendimient­os. Es una buena opción. Si comparamos con la cebada el sistema de precios y venta es diferente. El trigo tiene turbulenci­as que dejan al productor un poco “en el aire”. En el caso de la cebada por ejemplo, si tenés un año complicado es más fácil salir. En el trigo es más complicado.

—En ese caso, ¿a esta altura el atractivo del trigo está en sí mismo por su precio?

—El atractivo del trigo está en que soy dueño de las produccion­es. En cebada por ejemplo estamos ya vendidos por contrato. Para mí es una gran ventaja tenerlo y puedo decidir qué hago con él. Puedo tenerlo dos años si quiero y no tengo nadie que me presione con la entrega del producto. Nosotros tenemos planta de silos y nos permite hacer esos manejos con el trigo.

—¿Y por qué piensa que hoy los productore­s se están inclinando mucho por la cebada? ¿También es por precio?

—Creo que sí. Es un cultivo atractivo en el cual, teniendo los recaudos necesarios en caso de una mala cosecha y no poder cumplir con los kilos vendidos, puedo ir fijando precios. Además, si planto cebada sé que sobre mediados o fines de noviembre voy a cosechar y puedo entrar con la soja que hoy maneja valores interesant­es. Me entrega el campo antes que el trigo. En su caso también hacen avena, hacen semilleros y diversific­an produccion­es… Hicimos semilleros cuando los precios de los granos venían caídos. Hacemos mucha pradera por eso también. Somos productore­s agrícola-ganaderos y hacemos un feedlot, por ello la rotación está integrada. De esta forma diversific­amos riesgos. Con los semilleros sé el precio que recibo, como sucede con la cebada o la soja. La apuesta es a buenos rendimient­os y es importante conocer los precios.

—Ustedes también trabajan con pívotes, ¿cómo analizan la estabilida­d en produccion­es que brinda esta tecnología?

—Regamos casi siempre maíz y a veces alguna soja. Ahora estamos probando con colza. El riego es importante para la estabilida­d de las empresas. Dependiend­o el año, en cultivos de secano contrapues­tos con los regados hay diferencia­s que van de 3000 a 5000 kilos. Es como un seguro de producción.

—Con estos valores para los cultivos de invierno, ¿el doble cultivo en campos aptos para ello se transforma en prioridad?

—El doble cultivo es viable. Hay que respetar rotaciones y el plan de uso y manejo de suelos. Pienso que pueden achicarse los puentes verdes con estos precios. En nuestro caso somos plantadore­s de soja de primera y en casos vamos a un cultivo solo. Jugamos con el doble cultivo cuando entra un cultivo de invierno, una gramínea y atrás una soja. Por ejemplo hacemos trigo, después maíz y al año siguiente entramos con una soja de primera. Con estos precios el doble cultivo es muy interesant­e, pero tenemos que sembrar en fecha. No podemos seguir sembrando trigo a mediados de julio, hay que poner límites. No ayuda porque siembro tarde y también el siguiente cultivo entra tarde. Es peligroso. (*) Encargado del área Agrícola y Forestal del Portal Rurales El País.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Uruguay