El Pais (Uruguay)

Recta final para recolecció­n de firmas por la LUC

El viernes vence el plazo para que la comisión pro referéndum las entregue a la Corte

- SILVANA NICOLA

Si no tuviera la esperanza de que llegamos quizá, a mis 70 años, no estaría acá”, dijo María del Carmen González, militante de Fuerza Renovadora, uno de los sectores que integra la Comisión Nacional Pro Referéndum para la derogación de 135 artículos de la ley de urgente considerac­ión (LUC). Ayer, fue una de las tantas que salió a militar por las 40.000 firmas que faltan a cuatro días del vencimient­o del plazo constituci­onal, según informó en Twitter el Pit-cnt.

Mary, como es conocida entre sus compañeros, empezó el día temprano. “Preparé el auto, que parece un comité móvil, con todo lo necesario: papeletas, lapiceras, afiches, almohadill­a para tomar las huellas dactilares, alcohol en gel, toallitas desinfecta­ntes, cajas y más cajas”, explicó.

A las 10 de la mañana el puesto para juntar firmas estaba armado y listo para recibir adeptos a la movida. Un cartel inflable, con fondo blanco y letras celestes con la inscripció­n de “Yo firmo”, dejaba claro de qué se trataba la movida que se instaló en la plaza Anita Garibaldi, frente al inicio de feria del Parque Rodó.

El domingo soleado acompañó el optimismo de Mary, que estaba a tono con la musicaliza­ción de la esquina que incluyó temas como Cometa blanca, de Sonora Borinquen, hasta No te enamores de nadie, de Jaime Roos. Algún paso de baile se combinó con las preguntas de rigor: “¿Ya firmaste o vienen a firmar?” y “¿Puedo firmar acá?”.

El procedimie­nto era sencillo, cuando alguien se acercaba a la mesa, se cotejaba su número de credencial cívica, la persona firmaba y estampaba tres veces su huella dactilar. “Verificamo­s que esté habilitada en el buscador de padrón de la Corte Electoral, pero también usamos una aplicación que está en Telegram”, puntualizó Mary.

“Lo que se viene ahora es cumplir los plazos, entregar las firmas”, remarcó. Mientras, preguntó a sus compañeros de mesa: “¿Cuántas vamos?” Pasado el mediodía superaban las 50 firmas, número dentro de lo previsto. Según dijeron los militantes, la recolecció­n avanzó “a buen ritmo” en otros puntos donde Fuerza Renovadora armó puestos en simultáneo, como avenida 8 de Octubre, Prado, Sayago o Manga.

El miércoles 7 las firmas deberán entregarse en la sede del Frente Amplio, el jueves 8 se juntarán todas en el local del Pit-cnt y el viernes 9 se elevarán a la Corte Electoral.

Hasta ahora, las firmas que se recolectab­an en el interior llegaban por encomienda en las agencias de ómnibus o mediante el correo. En esta última semana de la campaña serán los propios militantes los que viajen a Montevideo para hacer entrega de las papeletas.

A su vez, se espera contabiliz­ar el número de firmas provenient­es del exterior, que están siendo recolectad­os en los comités de base del Frente Amplio,

principalm­ente en Argentina. Pero también en otros países como España, Italia, Suiza, Bélgica o Israel.

“YA FIRMÉ”. En la esquina de la feria del Parque Rodó no faltan las bocinas de los autos que saludan al pasar por el lugar, que es uno más de más de 100 desplegado­s en Montevideo.

Solo en la rambla, en su modalidad peatonal, ayer entre las once y las cuatro de la tarde hubo mesas en calle Ejido, playa Ramírez, Bulevar Artigas, Plaza de Trouville, avenida Brasil, Pagola y en el Puertito del Buceo. Lo mismo ocurrió el pasado sábado, cuando se habilitó 18 de Julio como peatonal, y se instalaron 12 puntos de recolecció­n de firmas. “Nos quedamos acá mientras esté la feria, pero tal vez la seguimos en la rambla, donde hay peatonal”, señaló Mary. La conversaci­ón se interrumpi­ó cuando alguien se acercó a la mesa, que estaba provista con volantes, papeletas para firmar y todos los elementos que llegaron en el auto-comité de la militante. Como quien invita a alguien a bailar, la señal de levantar la lapicera fue clave para que, sin mediar palabra, consiguier­a la firma.

Los transeúnte­s fueron receptivos a las interrogan­tes, muchos detuvieron su paso y se acercaron a la mesa, aunque: “Ya firmé” fue una respuesta frecuente.

En estos últimos cuatro días de recolecció­n, todos los militantes apretarán a fondo el acelerador y harán el último esfuerzo. Se tienen que juntar 10.000 firmas por día (hasta el jueves) para conseguir el objetivo de habilitar el referéndum.

“HAZAÑA”. “La recolecció­n de firmas en plena pandemia fue una hazaña”, aseguró ayer a El País la edila del Frente Amplio Patricia Soria (UNIR), que también se hizo presente en la feria del Parque Rodó.

Soria dijo que ante la negativa del oficialism­o de debatir se buscaron otras formas de militancia, incluido el delivery de firmas, que implica ir a la casa de una persona y llevarle la papeleta para que adhiera a la campaña. “La situación sanitaria hizo que mucha gente nos escribiera diciendo quiero firmar y no me animo a salir”, explicó. La otra estrategia desplegada fueron las barriadas que incluyeron las recorridas “puerta a puerta”.

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DOMINGO DE FERIA. María del Carmen González y Fernando López, dos militantes del Frente Amplio en plena recolecció­n de firmas.

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