Dos amigos se reencuentran en una canción bien personal
Qué tal el Buquebus? ¿Sigue funcionando bien?”, pregunta David Bisbal con una sonrisa apenas se inicia la videollamada por Zoom con El País. “Vaya aventuras vivimos allí con los músicos cuando hicimos una gira por Uruguay, Argentina y Chile”. Es una tarde de viernes y el cantante almeriense está en medio de una gira virtual de prensa para presentar “Dos veces”, su nueva colaboración con Luis Fonsi. Viste una camisa de jean, mantiene su clásico pelo enrulado —aunque con el toque moderno que se ve en la foto que ilustra esta nota— y usa la barba que se dejó hace unos años.
Se lo ve entusiasmado, y tiene sus motivos. Publicó una nueva canción junto a su colega puertorriqueño —con quien ya había colaborado hace unos años en el hit radial “Aquí estoy yo”— y retomó el tour de presentación de En tus planes, el álbum que lanzó el año pasado. “Cuando me digas, empezamos”, propone desde una de sus habitaciones.
—David, recién mencionaste tus viajes en Buquebus. ¿Qué recuerdos tenés de tus visitas a Uruguay?
—Me encanta Uruguay. Y lo digo de forma sincera porque he conocido diferentes lugares. Por supuesto que estuve en la capital y me sorprendió porque es una ciudad que la veo muy europea; es muy parecida a Madrid y a algunas zonas de Barcelona. Recuerdo que tuve la oportunidad de estar en la primera línea del Río de la Plata y ver a los pescadores que se ponen con su caña no solo para pescar, sino para pasar el rato y hablar con sus compañeros de la vida. También estuve en Punta del Este y disfruté mucho del paisaje, que es completamente diferente al de la capital, y que me fascina. Y bueno, el público es genial. He hecho un montón de
“Me propuse volver a la rumba de mis primeros discos”, dice sobre su canción junto a Luis Fonsi.
conciertos allí; la relación que tengo con ustedes es de muchos años, así que espero volver pronto. Tengo muchísimas ganas.
—Hace unos días publicaste “Dos veces”, tu colaboración con Luis Fonsi. Lo interesante es que seguís tu fusión con la música urbana, pero te interesa mantener el sello de canciones. La guitarra española y las palmas dialogan muy bien con el ritmo del reggaetón. ¿Cómo surge?
—Es lo que quería desde el momento en que me acerqué al mercado de los singles con “A partir de hoy”, que grabé con mi amigo Sebastián Yatra. Siempre le he dicho a los productores con los que he trabajado que el beat de la música urbana es el mismo de la rumba de mi país. El beat es electrónico, pero los tiempos realmente son similares. Por lo tanto me propuse volver a la rumba que hacía en mis primeros discos con canciones como “Lloraré las penas” y “Cómo olvidar”. Utilicé el ritmo de la rumba flamenca y la fusioné con la guitarra de mi tierra para darle mi esencia. Trabajamos para que sea caribeña y de mi país para formar una bomba latina.
—Ustedes se conocen desde hace tiempo. Hace 20 años, él te dio algunos consejos mientras participabas de Operación triunfo y más tarde grabaron “Aquí estoy yo”. Su amistad queda reflejada en el videoclip de “Dos veces”, ambientado en un gimnasio y que tiene mucho humor.
—Lo que teníamos claro es que no podíamos hacer un video en serio estando bien vestidos, porque eso ya lo hemos hecho. Queríamos hacer algo diferente para que la gente pudiera reírse, sobre todo en este tiempo, que es muy necesario. Ha sido brutal porque queríamos unir a dos amigos que hace mucho tiempo que van al gimnasio, que están completamente desfasados, usan ropa de los ochenta y que intentan seguir el ritmo de las clases de aerobics (se ríe). Teníamos que aprovechar nuestra amistad para algo que fuera gracioso de verdad.
—Si bien el video apuesta por un lado humorístico, la letra hace foco en darle una segunda oportunidad a una relación. El amor y el interés por rescatar el lado positivo de una relación ha sido la base de tu carrera. ¿Estás de acuerdo?
—Hay canciones que uno cree que se la estoy dedicando a una pareja, pero en realidad estoy pensando en un amigo o en un familiar, ¿me entiendes? No siempre tiene que estar dedicada a una pareja. Por ejemplo, me pasó con “Vuelve, vuelve”, que grabé con Danna Paola, que es una letra que cada uno lo lleva a su vida cuando la escucha. Puede ser sobre una relación, o a lo mejor es una canción para tu madre, tu padre, tu primo o un amigo. Realmente de eso se trata la música. Es cierto que en mis canciones he abarcado el amor en toda la extensión de su palabra, y el amor también puede hablar de una pareja, un familiar, un amigo o hasta la niñez. Lo más importante es que nos hemos concentrado en la multitud de temáticas que ofrece el amor.
—Y eso es lo que permite que tus canciones generen tanta identificación con el público: uno puede trasladar las letras a su vida.
—Sí, claro. Sucedió con “Si tú la quieres”, que la grabamos durante la pandemia y que te puede venir a la mente cualquier persona. Lo importante siempre es que la gente deje volar su imaginación con el contenido que propone la letra.