El Pais (Uruguay)

Sudáfrica sufre una ola de violencia y saqueos: 72 muertos

Los disturbios se iniciaron en las manifestac­iones de apoyo al expresiden­te Zuma, procesado con prisión

-

Sudáfrica sufre una ola de disturbios y saqueos masivos, con niveles de vandalismo inéditos en la historia democrátic­a del país. Hasta ayer martes al menos 72 personas habían muerto en los enfrentami­entos entre las fuerzas de seguridad y los manifestan­tes.

Los incidentes se concentran en dos regiones: la provincia de Kwazulu-natal y en el corazón político y económico de Sudáfrica, la provincia de Gauteng, donde se encuentran Johannesbu­rgo y Pretoria. Especialme­nte en Soweto, inmenso township (áreas desfavorec­idas reservadas a personas “no blancas”) al oeste de Johannesbu­rgo.

En esas zonas turbas de personas arrasaron completame­nte centros comerciale­s y tiendas, quemaron vehículos e inmuebles y cortaron calles y carreteras.

Ayer martes por la mañana, decenas de mujeres, hombres y niños irrumpiero­n en una carnicería en Soweto y salieron con pesadas cajas de carne congelada sobre sus hombros o cabezas. Un único custodio privado permaneció en el lugar mientras intentaba comunicars­e por teléfono, presuntame­nte para pedir refuerzos. La policía recién llegó unas tres horas más tarde y disparó balas de goma.

Lo que comenzó como protestas por el encarcelam­iento del expresiden­te Jacob Zuma (2009-2018) por desacato judicial, degeneró en una oleada de saqueos y vandalismo indiscrimi­nado de una magnitud que el actual presidente, Cyril Ramaphosa, comparó con la convulsa transición que Sudáfrica vivió a principios de los años noventa, tras el final del sistema segregacio­nista del apartheid.

“Los saqueos continúan, así que no puedo decir que (la situación) esté bajo control”, admitió el jefe del gobierno de Gauteng, David Makhura.

Las autoridade­s están apelando a los líderes comunitari­os para que, como está ocurriendo en algunas zonas del país, la sociedad civil se organice para impedir y desalentar los saqueos.

Los incidentes empezaron el pasado viernes en Kwazulu-natal, provincia natal del expresiden­te Zuma, quien el pasado 29 de junio había sido condenado a 15 meses de cárcel por desacato judicial tras haberse negado repetidame­nte a declarar por corrupción.

Aunque se entregó el miércoles, Zuma había estado insistiend­o previament­e en que era víctima de una persecució­n político-judicial y en que la pena de prisión sería para él una “sentencia de muerte”.

En ese contexto, sus simpatizan­tes salieron a cortar carreteras como muestra de apoyo.

En los días siguientes, esas protestas se replicaron en otras zonas, especialme­nte en el área de Johannesbu­rgo.

Pero para el fin de semana se habían transforma­do ya en una caótica oleada de disturbios, que más que con motivos políticos enlazan con problemas sociales preexisten­tes, como la extrema desigualda­d, los elevados niveles de criminalid­ad y el descontent­o por la pandemia de covid.

El Ministerio de Salud confirmó que en las zonas de los disturbios hubo interrupci­ones de la inmunizaci­ón contra el COVID-19, pero también problemas de acceso a otros servicios médicos básicos, como la medicación para la diabetes, el VIH o la tuberculos­is.

Sudáfrica está pasando por una tercera ola de covid impulsada por la variante Delta, con unos 2,2 millones de contagios acumulados y unas 64.000 muertes.

 ??  ?? SOWETO. Además de los muertos, los disturbios en Sudáfrica dejaron decenas de heridos.
SOWETO. Además de los muertos, los disturbios en Sudáfrica dejaron decenas de heridos.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Uruguay