Sobre el vino y la fama de sus polifenoles
Sí. Es verdad que el vino contiene polifenoles, que son sustancias antioxidantes. Y también es cierto que estas sustancias son buenas para el organismo. Pero eso no significa que beber vino sea beneficioso, inofensivo y que sea la única fuente de estos compuestos. Más allá de que los polifenoles puedan ser buenos para la salud, un nutricionista no dará la recomendación de tomar vino para obtenerlos.
“Al alcohol se le asocian varios efectos nocivos para la salud como para estar recomendando consumir vino por los antioxidantes que pueda aportar”, dijo la nutricionista Soledad Mangieri a El País. La profesional agregó que “existe una recomendación que anda en la vuelta, que en realidad es un mito, que afirma que el vino es bueno porque nos aporta polifenoles y que por eso tiene un efecto antioxidante. Pero resulta un poco complejo el manejo de esta recomendación, ya que el margen de riesgo-beneficio es bastante estrecho, y el alcohol no deja de ser una sustancia peligrosa y nociva que puede generar daños en la salud”.
La nutricionista recomendó que si el paciente quiere consumir antioxidantes, se vuelque por opciones más saludables que el vino: “Podés obtener antioxidantes de frutas y verduras, que son alimentos con innumerables beneficios. No es bueno tomar el vino como una fuente de antioxidantes, porque en realidad no es así, hay otros alimentos que los proporcionan de mejor manera sin generar los daños a la salud que puede generar el alcohol que pueden ser a corto, mediano y largo plazo. El alcohol puede aumentar los triglicéridos, causar disfunción eréctil o enfermedad cardiovascular, puede enfermar al hígado, al aparato digestivo, etc.”, indicó.