Impacto de pandemia en la prevención
La declaratoria de la emergencia sanitaria nacional en marzo de 2020 por la llegada de la COVID-19 al país impactó en la atención de diversas patologías, entre ellas el cáncer de mama. La Unidad de Mastología (UM) del Hospital de Clínicas procuró garantizar una atención oncológica adecuada y proteger a las pacientes de la infección con el virus y sus posibles complicaciones. Desde el inicio de la pandemia hasta el 30 de junio de 2020 “se produjo una merma en la actividad asistencial, en el número de tratamientos con quimioterapia por cáncer de mama realizados y en el número de pacientes referidos a la UM”. También la detección precoz se vio afectada, lo que para el doctor Gabriel Krygier va a impactar en el corto y mediano plazo. “Sin duda esto repercutió y lo vamos a ver en los próximos años. Hoy no lo podemos cuantificar. Probablemente muchas de estas personas sean diagnosticadas en etapas un poco más avanzadas. Hoy hay que reformular las estrategias de prevención”, dijo en Calidad de Vida en El País.
Con el fin de mejorar la asistencia de las pacientes con cáncer de mama, en 1994 se creó en el Servicio de Oncología del Hospital de Clínicas la UM. La misma ha realizado varios estudios para evaluar su funcionamiento. Así ha constatado que, si bien se cumplen los criterios de calidad, el intervalo entre el diagnóstico y el primer tratamiento fue inferior a las seis semanas para el 60% de las pacientes, siendo el mínimo requerido de 75%; por lo que habría que mejorar ese tiempo de espera. El tiempo transcurrido entre la cirugía y el inicio de la quimioterapia fue el adecuado para el 80% de las pacientes, sin embargo, quienes iniciaron el tratamiento luego de los 90 días de la cirugía tuvieron una menor sobrevida.