Optimismo para lo que viene, pero aún no está todo resuelto
Como mensaje final, de cara a lo que puede ser la próxima zafra y el futuro de la oleaginosa en nuestro país, Gigena dijo que ve un panorama optimista en los mercados y hay que “seguir incorporando la soja en sistemas integrados con pasturas y arroz en el este del país, donde ya vimos sus beneficios”.
Para Guigou la soja ha sido un cultivo muy “noble”
para el Uruguay, y hay un tremendo camino de desarrollo sustentado en la genética y buscando mejorar los suelos. Para el productor agropecuario del litoral y director de ADP, rápidamente debemos “subir 500 kilos la productividad de soja” y buscar los plus de rendimiento hacia el futuro.
En el caso de Martínez, la disminución del riesgo está apalancada por la diversificación con cultivos de invierno que hoy son “igual o más rentables que la soja”. Para el productor agropecuario del centro del país y director de Agromotora Flores, hay espacio para todos los rubros, considerando ganadería, cultivos de invierno, puentes verdes, semilla fina, cultivos de verano, pasturas y es importante valorar que “diversificando también protegemos a la soja”.
Walter Baethgen, vicepresidente de INIA e integrante de la Universidad de Columbia en Estados Unidos, remató diciendo que hay que trabajar en los seguros en base a índice climático y hacerlos accesibles al productor, porque “es una manera importante de transferir riesgos”.