El sueño cumplido de una joven floridense
Alfonsina Mesa tiene 15 años y ya publicó su segundo libro
■■Tiene apenas 15 años y dos libros publicados. La joven floridense Alfonsina Mesa comenzó a escribir a los 12 y, luego de pasar por borradores, el resultado se llamó ¿A quién elijo? Entre dos amores, que publicó el año pasado.
La historia se centraba en Marixa, una adolescente que tenía que elegir entre dos chicos que se disputaban su corazón, y estaba contada a través de diálogos en las redes sociales.
“Mucha gente todavía me lo está pidiendo”, dice Mesa a El País acerca de su primer libro. “Nunca pensé que fuera a gustar tanto lo que hago, pero les encantó mucho”.
Su segundo libro, que acaba de ser lanzado, es Un misterioso campamento y se centra en Morena, quien intenta por todos los medios convencer a sus padres para que la dejen ir al campamento del título. Llega, conoce a nuevos amigos y de repente dos de los chicos desaparecen. Así, la protagonista tendrá que reunir a sus compinches para crear un plan de rescate.
Las redes sociales vuelven a tener un lugar importante en el diálogo de los personajes, como lo tienen en la vida de la propia autora y sus amigos.
Sin una editorial que la apoye, Mesa decidió publicar sus libros mediante una imprenta de su Florida natal. Ella misma se encarga de distribuirlos por las librerías de su ciudad; en Montevideo, hay ejemplares disponibles en Escaramuza.
Además de escribir, corregir y estar atenta a los detalles, Alfonsina ya configura toda una vida de escritora. Recorre escuelas y liceos para hablar de sus libros, atiende sus redes sociales y, en paralelo, lleva la vida común de adolescente, asistiendo al liceo.
“Me lleva mucho tiempo escribir y me concentro más de noche. Es el momento en el que surge más la inspiración. De día estoy muy ocupada con el colegio y con mis responsabilidades, aunque paso todo el día pensando en el libro”, comenta entre risas la autora.
Cuando Mesa dijo que quería escribir un libro, sus padres no pensaron que fuera a materializarse ese sueño, pero la chica ha demostrado perseverancia y su esfuerzo rindió frutos.
“El primero se agotó e hicimos varias ediciones. Y mis padres están superorgullosos de que pueda seguir lo que me apasiona”, reflexiona.