EL CAMINO CON EL PAN
Paul Fontaine siempre se sintió atraído por la gastronomía, pero al elegir una carrera apostó por astronomía, otro de sus amores. La crisis del 2002 lo obligó a abandonarla, y años más tarde probó con ingeniería. La cocina seguía siendo “como una amante”, que afloraba ante familia y amigos en el tiempo libre. Pero llegó un momento en que su vida dio un giro y lo llevó por el camino que tantas veces había imaginado: la panadería.