A las cosas
Faltan todavía más de dos años para que los partidos políticos elijan en comicios internos a los candidatos presidenciales que les representarán en las elecciones nacionales de octubre de 2024. Parece, a simple vista, demasiado tiempo. Y sin embargo en algunas tiendas pareciera que la campaña por las precandidaturas ya ha comenzado.
En el Frente Amplio todo indica que la intendenta de Montevideo, Carolina Cosse, y su colega canario Yamandú Orsi, serán quienes disputarán la candidatura presidencial de la coalición de izquierdas.
Pero, ¿en verdad corren solos? El actual presidente del Frente Amplio, Fernando Pereira, ¿se mantendrá efectivamente al margen de la competencia o, llegado el momento, se sumará a la pelea? ¿Y el comunista Oscar Andrade? ¿Le dará sus votos y los de su partido a Cosse o se volverá a colocarse en las gateras como en 2019, cuando fue una de las grandes sorpresas de las internas frenteamplistas?
¿Habrá esa vez un precandidato socialista o el viejo partido terminará militando por alguno de los demás contendientes? ¿Y los “moderados” frenteamplistas? ¿Qué harán? Sin Danilo Astori ni Daniel Martínez entre los anotados, ¿irán detrás de Mario Bergara?
En el Partido Colorado las aguas no están más calmas. Ya sin Ernesto Talvi, Ciudadanos exhibe algunas diferencias internas y no está claro quién será el precandidato presidencial del sector. Algunos miran al ministro de Medio Ambiente, Daniel Peña. Otros al presidente del Codicen, Robert Silva. Pero muchos temen que, si Pedro Bordaberry regresa a la política y se lanza en procura de la candidatura colorada, una parte más o menos importante del sector se vaya detrás del exlegislador.
¿Y el sanguinettismo? Hay quienes afirman que, en su sector Batllistas, algunos también apuestan al regreso de Bordaberry a la política, mientras otros ya le han anunciado al expresidente que buscarán su propio camino. ¿Y la 15? Una verdadera incógnita.
En Cabildo Abierto también hay movimientos. El líder indiscutido del sector es el senador Guido Manini Ríos. Suya será la candidatura presidencial en 2024. Salvo que el ministro Daniel Salinas, el mejor valorado en el gobierno, estuviera interesado en correr esa carrera. ¿Salinas no estaría en condiciones de ganarle la candidatura a Manini Ríos? ¿Será por eso que hay tantos interesados en que el secretario de Salud Pública pase a ocupar un cargo internacional?
Hay quienes dicen que a Salinas también lo miran con interés en el Partido Nacional. Entre los blancos, el nombre del secretario de la Presidencia de la República, Álvaro Delgado, corre con gran ventana. Pero la vicepresidente Beatriz Argimón ha formado recientemente su propio grupo. ¿Y la vieja Alianza Nacional? ¿Y el denominado “Grupo de los Intendentes”?
Falta mucho. Y muchos son los que ya se peinan para la foto. Mientras tanto, el país necesita que los que integran la coalición de gobierno trabajen juntos para encarar las reformas que se necesitan y ejecutar su programa de gobierno. Porque si el gobierno no soluciona los problemas de la gente, no habrá candidato multicolor con chance. Y el camino para el FA estará despejado.