Argentina sospecha espionaje de Irán
■■ La Justicia argentina reúne evidencia para ver si puede acusar de espionaje a los iraníes de la tripulación del avión venezolano retenido en Buenos Aires.
En tanto, el jefe del servicio de inteligencia de Paraguay, Esteban Aquino, aseguró ayer viernes que uno de los tripulantes iraníes del avión es Gholamreza Ghasemi, vinculado a la Fuerza Al Quds, considerada una organización terrorista por Estados Unidos. “El capitán Gholamreza Ghasemi no es un homónimo. Se trata de una persona vinculada a Al Quds”, dijo Aquino en referencia a la fuerza de élite de los Guardianes de la Revolución iraní.
■ El ministro de Inteligencia paraguayo, Esteban Aquino, fue consultado ayer viernes sobre si la alerta para Argentina y Uruguay en torno al avión venezolano fue emitida el miércoles 8 de junio —día en que la aeronave partió con rumbo a Montevideo— y aseguró que no quería entrar en detalles, pero que “fue antes de esa fecha”.
“Lo importante es que la Argentina y Uruguay reaccionaron y tomaron acciones rápidas”, sostuvo en declaraciones a ABC Cardinal.
Consultado por El País sobre este punto, el ministro del Interior, Luis Alberto Heber, indicó que recibió la alerta de la inteligencia paraguaya “el mismo día, horas antes de partir” el vuelo desde Ezeiza rumbo a Montevideo.
Tomando como base esa alerta, fue que el ministro Heber dio aviso a su par de Defensa, Javier García, quien a su vez resolvió de que no se dejara ingresar al avión si no era por razones humanitarias, por lo que la aeronave tuvo que retornar al aeropuerto argentino.
Heber dio a conocer este jueves en conferencia de prensa que fue desde Paraguay que se recibió la información que llevó a rechazar el aterrizaje del avión, pero no indicó cuándo. “Recibí la información formal de la Inteligencia
Esteban Aquino.
paraguaya y actuamos rápidamente con el ministro de Defensa y pudimos evitar de que el avión entrara al espacio aéreo uruguayo”, indicó.
El régimen venezolano de Nicolás Maduro criticó la decisión de Uruguay de no dejar entrar el avión.
“Lo de Venezuela es político, no técnico. Y no había ninguna razón humanitaria para permitir el aterrizaje”, señalaron fuentes del gobierno de Luis Lacalle Pou a El País, luego de que la Cancillería de Maduro emitiera un comunicado condenando la actitud de Uruguay de no permitir el pasado 8 de junio el aterrizaje del avión de esa nacionalidad con tripulación iraní.
En el comunicado venezolano, se “rechaza categóricamente el irresponsable manejo que ofreció la autoridad aeronáutica del Uruguay, al revocar el permiso de sobrevuelo otorgado a la empresa venezolana Emtrasur, mientras que la aeronave se encontraba en el aire (…) para hacer una escala técnica de abastecimiento”.
La tripulación, prosigue el escrito, “se vio obligada a retornar inmediatamente hacia el aeropuerto de Ezeiza, en Argentina, no contando con el combustible reglamentario, poniendo en grave riesgo la vida de la tripulación”. Además, el gobierno de Maduro asegura que, una vez aterrizara en Argentina, la aeronave contaba con 17.000 litros de combustible, “muy por debajo de lo recomendado por el Procedimiento Operacional estandarizado de Emtrasur, el cual está establecido en 20.000 litros”.
Las fuentes del gobierno uruguayo, sin embargo, advirtieron que con ese combustible la aeronave podía volar, “perfectamente”, durante una hora más. Además, señalaron que, cuando se autoriza el despegue de un avión, “esto se hace en virtud de que tenga el combustible suficiente para llegar a destino”. Y no solo eso: “también se debe fijar un aeropuerto alterno, al que debe tener combustible no solo para llegar, sino también para volar durante 45 minutos más”.