Un viaje que deja miles de muertos
■ Asfixiados, masacrados, víctimas de accidentes viales o ahogados, miles de migrantes perdieron la vida en los últimos años en su intento por llegar a Estados Unidos. El caso más reciente es el de esta semana en San Antonio, Texas, donde 51 migrantes fueron encontrados muertos dentro y en los alrededores de un camión abandonado.
Desde 2014, unos 6.430 migrantes fallecieron o desaparecieron en el trayecto hacia Estados Unidos, según la Organización Internacional de las Migraciones (OIM) de la ONU. De ellos, 1.248 tan solo en 2021.
Más de 60% de esos decesos ocurrieron en la frontera de 3.169 km entre México y Estados Unidos. Hasta el 22 de junio de este año, la OIM tenía documentados 493 muertos o desaparecidos, incluidos 46 menores.
La principal causa de esas muertes desde 2014 es el ahogamiento con 1.750 casos, la mayoría ocurridos en el río Bravo, frontera natural entre México y Estados Unidos.
La falta de agua, alimentos y de un sitio para quedarse costó la vida a 861 personas desde 2014; otras 852 fueron víctimas de la violencia y 850 murieron en accidentes o por viajar en condiciones infrahumanas, de acuerdo con la OIM.
El 9 de diciembre de 2021, un tráiler que trasladaba clandestinamente a unos 160 migrantes irregulares chocó contra un puente peatonal en una carretera de Chiapas (sur de México), dejando 56 fallecidos, 40 de Guatemala.
El 22 de enero de 2021 fueron localizados los cuerpos calcinados de 19 personas, 16 de ellas guatemaltecas, en una zona rural del estado de Tamaulipas, cerca de la frontera con Estados Unidos. Una veintena de policías y de agentes migratorios fueron detenidos como probables responsables.
El 23 de julio de 2017, una decena de migrantes fueron encontrados sin vida dentro de un tráiler abandonado en un estacionamiento de un centro comercial de San Antonio, Texas.