Dirigentes políticos debaten sobre mecanismo de urgente consideración
En un simposio se discutió sobre la importancia de la LUC
■■ Ayer, en el Edificio Paraninfo de la Universidad de la República, tuvo lugar el último simposio de la serie que organizó el proyecto “La máquina de aprender”. En este quinto espacio participaron politólogos y figuras políticas de los principales partidos que hoy cuentan con representación electoral.
Luego de una introducción realizada por los profesionales en ciencias políticas, se abrió el espacio para que los dirigentes políticos tomaran la palabra. Las diferencias surgieron cuando se habló de la última Ley de Urgente Consideración (L.
El senador y líder de Cabildo Abierto, Guido Manini Ríos expresó que, si bien se trata de una norma que “debe ser la más extrema de todas las leyes que estamos tratando” por la cantidad de temas, favoreció la productividad en la concreción de los objetivos del gobierno respaldados por el voto de la población.
Por su parte, Pablo Iturralde, presidente del Directorio del Partido Nacional, prefirió referirse a la LUC como un proceso muy discutido, con poco de antidemocrático. Sobre el mecanismo manifestó ser “un defensor acérrimo, agregó Iturralde.
El factor de la cantidad de temas que se incluyen dentro de la herramienta que posee el Poder Ejecutivo, fue otro de los factores que generó discrepancias.
Rafael Michelini, en representación del Frente Amplio, generó la polémica cuando se refirió a la Ley de Urgente Consideración como una “ley ómnibus” y expresó que “no va a existir más” por su “ineficacia y su carácter inconstitucional”.
El senador del partido colorado Ope Pasquet, aludido por Michelini, mencionó la pronunciación de la Suprema Corte de Justicia (SCJ) que dió a la LUC el carácter de constitucional. “Además la ciudadanía se acaba de pronunciar y la que debemos de respetar decida lo que decida”, advirtió Pasquet.
Por su parte, el ministro de Trabajo, Pablo Mieres, recordó que todos los años el Poder Legislativo debe trabajar sobre una Ley de Presupuesto —luego convertida en Ley de Rendición de Cuentas— que implica “un enorme empaquetamiento” y que contiene un carácter multitemático que todos los gobiernos han utilizado.
El intercambio culminó con la frase categórica de Michelini al respecto: “no hemos aprendido nada”.
Con el último referéndum de marco, se compartió el valor de ese tipo instrumento para dar voz a la ciudadanía, pero hubo discrepancias sobre su utilización política con el propósito de frenar cambios sustanciales.