Treinta y Tres, el más golpeado
Desplazados aumentaron a 2.184 pero se espera un mejor escenario en los próximos días
Las inundaciones, que hasta ayer habían desplazado a 2.184 personas en todo el país, comenzaron a descender en algunas zonas. El departamento con la mayor cantidad de personas desplazadas de sus hogares continúa siendo Treinta y Tres (fotos) con 1.130. Alicia y Martín, del barrio
Las Delicias, contaron a El País que esta inundación fue“la segunda más grande”que les tocó vivir luego de la ocurrida en el año 2007, en la que el río Olimar alcanzó los 10,10 metros por encima de su altura normal. Desde la comuna dijeron que ahora el río alcanzó los 9,60 metros.
Las familias afectadas por las inundaciones ven con ojos de esperanza los días que vienen. Las inundaciones que para la tarde de ayer habían desplazado a 2.184 personas en todo el país comenzaron a descender en algunas zonas, permitiendo que varios de los afectados hayan comenzado tareas de desinfección en sus casas para emprender el retorno.
Como ocurrió desde la llegada de las copiosas precipitaciones que sufrió el territorio uruguayo, el departamento con mayor cantidad de personas desplazadas de sus hogares continúa siendo Treinta y Tres con 1.130 —casi tres veces más que el segundo departamento que es Paysandú, con 454.
Alicia y Martín, del barrio Las Delicias del departamento de Treinta y Tres, contaron a El País que esta inundación fue “la segunda más grande” que les tocó vivir luego de la ocurrida en el año 2007, en la que el río Olimar alcanzó los 10,10 metros por encima de su altura normal.
Desde la comuna dijeron a El País que en esta oportunidad el río alcanzó los 9,60 metros sobre su nivel normal, aunque para la tarde de ayer había comenzado a bajar. De igual manera, el intendente Mario Silvera relató que se encuentran “esperando por las aguas del norte”, que podrían generar un “pequeño aumento”.
“Esperamos poder volver a nuestra casa para mañana”, dijo Martín, el vecino de Las Delicias. Además, tanto él como Alicia aseguraron que si bien “paró de llover” en la tarde del miércoles, “es difícil que se desagote el agua porque es una zona baja”.
Noelia Silvera es otra de las vecinas del barrio Las Delicias, y junto a su esposo se dedicaron a realizar tareas de higiene en la tarde de ayer, con la esperanza de poder retornar a su hogar “lo antes posible”.
También recordó la inundación del año 2007, y agradeció que “el agua esté bajando”. Noelia utilizó de referencia un contador de agua, el que según dijo, “estos días estuvo abajo del agua y ahora está del todo visible”.
En su caso también sufrieron las mascotas. “Tuve que entrar con el agua hasta arriba para poder salvar al cuy de mi hija”, contó y agregó que “los gatos se asustaron, se subieron al techo y nadie los podía bajar”.
Horacio Pintos, del Comité Coordinador de Emergencias Departamentales (Cecoed) de Treinta y Tres indicó a El País que “por suerte se dio un día soleado (por ayer) que cambió la perspectiva” con respecto a las jornadas anteriores.
También hizo referencia a las 850 personas autoevacuadas que a modo de prevención ante las inundaciones se fueron “por sus propios medios a casas de familiares o conocidos”.
“Los evacuados están siendo asistidos por el Cecoed, con alimentación, atención médica e incluso actividades lúdicas para los niños”, agregó.
El director de Sistema Nacional de Emergencias (Sinae), Santiago Caramés, expresó en conversación con El País la “necesidad de dar a los afectados las mejores condiciones, principalmente teniendo en cuenta los días fríos que se vienen”.
Desde Cecoed de varios departamentos confirmaron que los niveles de agua de los ríos y arroyos que crecieron en los últimos días se encuentran en descenso, aunque “todavía falta mucho”, expresaron los coordinadores.
Rocha con 23 y Soriano con 14 se sumaron ayer a la lista de departamentos con personas desplazadas, que pasó de ocho a 10.
A su vez, en Durazno —uno de los departamentos que registró mayor nivel de lluvias acumuladas — se sumaron seis personas desplazadas, con un total de 109. Según explicaron desde la Intendencia de Durazno, esto se produjo porque el río Yi superó los 8,70 metros, el límite para comenzar a trasladar familias.
Luego de varios días de intensas precipitaciones, gran parte del país, incluyendo Montevideo, amaneció con cielo descubierto, aunque también se registró un descenso en las temperaturas.