El Frente Amplio no logró votos para cortar los privilegios de Caja Militar
De naturaleza transitoria, recaía en una minoría de oficiales con haberes superiores a los $ 57 mil.
El oficialismo argumentó que “se está tratando de reformar una caja que tiene “incongruencias abusivas”, que busca resolver un déficit de 500 millones de dólares, que es lo mismo que paga la sociedad por 500 mil jubilados que están en otras cajas -Un coronel cuando se jubila pasa a ganar como general, lo que quiere decir que el Estado uruguayo le paga más cuando está jubilado que cuando estaba en actividad. -Solo el 20% de los jubilados militares pagarían este tributo y solo se aplicaría para las jubilaciones que son superiores a los 57 mil pesos.
Por 49 votos en 99, la Cámara de Diputados deshechó ayer el proyecto del Poder Ejecutivo que creaba un tributo para las jubilaciones militares más altas. La iniciativa contaba con media sanción del Senado.
Oídos los informes de las distintas bancadas, a media tarde se abrió el debate en el plenario de la Cámara, donde se escucharon las distintas fundamentaciones, a favor y en contra del proyecto, donde se sabía de antemano que el Frente Amplio difícilmente conseguiría la mayoría necesaria. Sobre las 23.20 horas, tras casi ocho horas de debate, y habiéndose escuchado a una veintena de oradores, se levantó la sesión. El proyecto creaba un impuesto transitorio por 18 meses y progresivo que gravaba a las jubilaciones de los retirados con haberes superiores a los $ 54 mil. Con esta iniciativa, el Poder Ejecutivo buscaba en parte abatir un déficit en el Servicio de Pensiones y Retiros de las Fuerzas Armadas que el año pasado trepó a los 550 millones de dólares, alrededor de un 1% del PBI.
El monto de esta erogación es el mismo que paga la sociedad por 500 mil jubilados que están en otras cajas. Desde el oficialismo se apuntó que lo que se busca es propender a una contribución solidaria de todos los ciudadanos sin privilegio alguno.
Se dejó en claro que solo el 20% de los jubilados militares pagarían este tributo y se recaudaría unos 75 millones de dólares.
Entre los argumentos centrales de los legisladores del Frente Amplio que promueven el proyecto se puso como base resolver una situación de absoluta inequidad ya que a diferencia del resto de los uruguayos, los oficiales se jubilan con el 100% de sus salarios y con el grado inmediato superior. Además, no tienen tope.
Según los argumentos del FA los uruguayos pagan, todos los meses, en promedio unos $ 60.000 por cada jubilación militar alta.
A ello se agrega que mientras la edad de retiro militar es de 47 años, en cualquier otra rama es de 63, lo que implica casi doce años de diferencia de edad con el resto de la ciudadanía.
Se dejó en c laro además que el proyecto está referido a las jubilaciones más altas, lo que significa que solo el 20% de los jubilados militares pagarían este tributo y solo se aplicaría
para las jubilaciones que son superiores a los 57 mil pesos. Para completar sus argumentaciones recalcaron que la prestación es transitoria, y solo se hará por 18 meses.
Durante el debate se hizo hincapié en que el problema no está en los soldados, sino en los oficiales, quienes se jubilan por el 100% de sus salarios y con el grado inmediato superior.“Se está tratando de reformar una caja que tiene “incongruencias abusivas”. Un coronel cuando se jubila pasa a ganar como general, lo que quiere decir que el Estado uruguayo le paga más cuando está jubilado que cuando estaba en actividad. Este es el disparate de la caja que estamos dispuestos a transformar. Este tributo le va a dar aire al Estado uruguayo para poder invertirlo en educación, salud y vivienda”, señaló Alejandro Sánchez.
Dijo que si bien comparte la idea de que debe haber un régimen especial para los militares porque no les pagan horas extras, nocturnidad y están al servicio de la nación, pero su régimen no puede ser“exagerado”.
¿Inconstitucionalidad?
Mientras desde la oposición se esgrimía como principal fundamento del rechazo al proyecto, la supuesta inconstitucionalidad. Desde el Fa se consideró que dichos argumentos esgrimían “una pobreza conceptual muy fuerte y son traídos de los pelos buscando “tergiversar” la discusión y “proteger” a los altos privilegios que tienen un puñado de militares en Uruguay.
Se hizo hincapié en que este beneficio que reciben los retirados militares es un “resabio de la dictadura” porque“se hicieron con la idea de que Uruguay estaba en guerra. En función de eso, había que otorgar ciertos privilegios y consideraciones por el desgaste que eso implicaba. Pero en Uruguay no existió ninguna guerra; lo que existió fue terrorismo de Estado y persecución contra el pueblo. Posteriormente, en democracia, está claro que no hubo ningún episodio que amerite tener ese tipo de privilegios tan desorbitantes en comparación con los que tiene el trabajador común”. Más allá del monto, lo que se quiere buscar con esta iniciativa es una“necesaria equidad”entre los sistemas de seguridad social, afirmó^el diputado Alfredo Asti. Según sus palabras, las diferencias en edad y en años de servicio no pueden ser “tan notorias”como las que existen ahora. “¿Por qué los pasivos militares pueden recibir aguinaldo y los demás uruguayos no?, ¿por qué tienen que ser muy distintas las pensiones que reciben los militares que aquellas que reciben otros trabajadores? Lo único que nosotros estamos buscando, además de debatir el déficit de la Caja Militar, es que converjan los derechos y obligaciones que tienen todos los trabajadores”.
En lo que respecta a la supuesta inconstitucionalidad expresó: “La Suprema Corte de Justicia tiene decenas de fallos sobre esto en los cuales acepta que el impuesto a la seguridad social se realice, ya que poner en condiciones de igualdad a los pasivos es constitucional”. En la oportunidad recordó que la única vez que la Suprema Corte mencionó que era inconstitucional un tributo sobre pasivos fue el IRPF, ya que entendía que no era aceptable que se pusiera el mismo tributo a los trabajadores que a los pasivos. Una iniciativa que fue “muy analizada”por el Ejecutivo Por su parte, Murro afirmó que el tema del impuesto a las pasividades militares ha sido “considerado” a nivel de todo el Ejecutivo. Dijo que desde el gobierno se ha definido una“propuesta razonable y posible”, que fue“muy analizada” y en la que se consultó a los comandantes militares.