¡GIGANTE DEFENSOR!
Los violetas vencieron 4-2 a Bolívar, y solo una paliza en casa los dejará fuera de la Segunda Fase de la Copa.
Defensor logró una histórica victoria en la altura de La Paz, 4-2 sobre Bolívar, y con este resultado quedó prácticamente clasificado a la siguiente fase de la Libertadores donde su rival será Barcelona ecuatoriano.
La los equipos uruguayos la derrota. Pero Defensor destrozó las estadísticas y obtuvo un brillante triunfo ante Bolívar, al que venció 4-2 en la capital boliviana con goles de Martín Rabuñal, Pablo López, Álvaro Navarro e Ignacio Laquintana.
Ganando, empatando, o incluso perdiendo por uno o dos goles (siempre cuando esta diferencia no sea mayor a un 4-2, que forzaría los penales), el equipo del “Polilla” Da Silva se meterá en la segunda fase de la Copa Libertadores, donde espera el Barcelona de Guillermo Almada.
La serie ante Bolívar se definirá el próximo miércoles en Montevideo.
¿Qué más podía pedir? La película que se reproducía en el Hernando Siles tenía el libreto esperable: Bolívar, con la ayuda de la altura de La Paz, intentaba asfixiar a Defensor, en cuya mitad del campo transcurrían los minutos.
El equipo del “Polilla” se paraba de forma compacta, con poca distancia entre sus líneas, para tratar de reducirle los espacios disponibles al rival y acortarles el trayecto a los hombres violetas. Esto ofrecía un doble beneficio: limitar a los bolivianos y cuidar el valioso oxígeno.
Un aguacero de centros caía sobre el área de Defensor, que lograba mandarlos a donde fuera antes de que se transformaran en una chance clara de peligro.
Ofensivamente, no pudo hacer mucho. Conspiraba contra esto la brevedad de sus posesiones: al perder la pelota rápidamente, por culpa de la presión del rival combinada con la imprecisión propia, se tornaba imposible elaborar juego colectivo y soñar con pisar el área de Bolívar.
Sin embargo, las pocas veces que superó el límite de la mitad de la cancha, el equipo del “Polilla” le mostró al mundo que los bolivianos no eran maestros a la hora de marcar.
Pero el manual establece que en La Paz hay que pasarla mal un rato, y Defensor lo hizo a partir de los 20’, cuando un tiro de Callejón desde las puertas del área se encontró con una gran reacción de Rodríguez, quien se tiró contra su palo izquierdo para extender la vida del 0-0.
Un remate de Arce que le hizo caricias al palo y una volea de Riquelme que se perdió algunos centímetros del travesaño fueron los otros avisos de Bolívar, que en medio de estas oportunidades se quedó sin Leaños, a quien el árbitro peruano expulsó por haber pisado a Beltrán.
Aunque seguramente hubieran preferido que el partido fuera diferente, el trámite no le era totalmente desfavorable a los “tuertos”. Es cierto que Bolívar controlaba le pelota e imponía el ritmo, pero con el paso de los minutos llegaba con menos frecuencia, y cuando lo hacía se encontraba con un dispositivo defensivo eficaz.
Irse al vestuario empatando 0-0 hubiera sido una magnífica noticia para Defensor, así que haberse ido en ventaja fue un premio que dibujó una sonrisa en todos los rostros violetas.
Demostrando que la altura también puede ser un aliado, Piquerez probó de media distancia y estuvo a punto de abrir el marcador, lo que sucedió pocos minutos después. Fue a los 47’, cuando una Defensor ejecutó una contra de libro de texto que Martín Rabuñal terminó con un bombazo de derecha, que selló el 1-0 cuando el primer tiempo agonizaba.
Un sueño violeta
Bolívar comenzó el segundo tiempo profundizando su intención de forzar un ritmo vertiginoso, que pusiera en apuros a Defensor y le permitiera llegar al ansiado empate.
El dueño de casa no les daba respiro a los violetas, que habrían sucumbido a esa presión de no ser por el “Moneda” Rodríguez: el arquero se disfrazó de bombero y extinguió todas las amenazas.
Los “tuertos” volvieron a dar una lección de efectividad a los 54’, cuando Pablo López metió el 2-0 con una maravillosa definición: recibió un pase, se internó en el área, le ganó la posición a su marcador y, cuando el golero salió desesperado a achicar, el joven metió un “sombrerito” de antología que fue a morir a la red.
Bolívar acusó el golpe. Su ánimo quedó desecho, y el rendimiento del equipo se dio por enterado de inmediato.
Mientras los bolivianos intentaban reponerse, Defensor aprovechó el momento. A los 62’ le anularon un gol por fuera de juego de Pablo López, que no valió pero generó otra prueba de las flaquezas defensivas del rival, que volvieron a exhibirse poco después, cuando una contra terminó con un remate del“Tata”González que se fue apenas por encima del travesaño.
El ingreso de Jorge Pereyra Díaz marcó un hito dentro del encuentro, pues fue quien demostró que Rodríguez (quien le había ahogado otro grito a Riquelme) era vulnerable. Con cinco minutos de diferencia (el primero a los 66’ y el segundo a los 71’), metió los dos goles que pusieron un empate que no parecía verse por ninguna parte.
Pero, lejos de ahogarse en un mar de lágrimas, Defensor puso el pecho y demostró que quería ganar el partido. Como si no advirtiera que el partido se jugara a más de 3.600 metros de altura, los del “Polilla” se lanzaron al ataque y crearon varias chances.
A los 73’ un pase al medio generó una pésima respuesta del arquero boliviano, que dio un rebote y se la regaló al “Chino” Navarro, pero se rehízo ganándole el mano a mano al delantero.
Cinco minutos después, el árbitro anuló un gol violeta por una supuesta falta, que nadie más vio.
La justicia apareció poco más tarde, a los 80’, cuando Pablo López, por destrozo el delantero más influyente de Defensor en el partido, pasó entre dos y eludió al golero, que le cometió falta cuando era superado. El “Chino” Navarro cambió el penal por gol para hacer estallar de alegría a las gargantas violetas.
Como para que no quedaran dudas, el“pibe”Laquintana se mandó un golazo: vio adelantado al arquero y, con un bombazo desde la mitad de la cancha, puso el 4-2 en los descuentos.
El pitazo del peruano hizo realidad la valiosísima victoria de Defensor que, salvo una catástrofe en Montevideo, estará en la próxima instancia de la Copa Libertadores.