La “colisión” opositora: Manini se vuelve un obstáculo para la estrategia de Lacalle Pou
“La oposición es un manicomio, administrado por sus propios pacientes”, aseguró el viceministro de Economía, Pablo Ferreri.
Lacalle Pou alimenta el sueño de la coalición como su mejor alternativa para ganarle al Frente Amplio. Sabe que necesita el voto de todos los sectores que puedan sumarle, sin embargo choca con un grave problema, las diferencias internas entre los sectores de la oposición son cada vez más grandes. Sobre todo desde que un jugador inesperado entró en escena para alborotarles el rancho: Guido Manini Ríos.
Ernesto Talvi no lo quiere adentro, Pablo Mieres tampoco y Edgardo Novick no comparte los criterios del excomandante en jefe del Ejército, sobre todo en temas de seguridad.
Además, Manini viene a cambiar el ADN de centro-izquierda que delineaba las estrategias electorales de la oposición en una alianza con Pablo Mieres, por una impronta más de ultraderecha radical que lidera el exmilitar.
Esa metamorfosis opositora cambia radicalmente el tablero político. El más enfático en denunciarlo fue el viceministro de Economía, Pablo Ferreri, quien aseguró a LA REPÚBLICA que los supuestos “socios” están en una guerra continua.“Se dicen de todo, todos los días. El candidato a vice de Manini refiriéndose a Sanguinetti cómo cruceras; Talvi hablando mal de Manini; Mieres, hablando mal de Manini; y todos, hablando mal de Sartori. Nadie puede tener esperanzas ciertas de progreso y de crecimiento en un manicomio administrado por sus propios pacientes”, subrayó con ironía el economista.
“Nadie puede tener esperanzas ciertas de progreso y de crecimiento en un manicomio administrado por sus propios pacientes como es hoy la oposición”. Pablo Ferreri
“¿Qué coalición puede liderar Lacalle?, si ni siquiera cuando habló de seguridad durante el debate mencionó la iniciativa Vivir sin Miedo que impulsa un líder de su propio partido, como Jorge Larrañaga”. Javier Miranda
“Derecha pseudomilitar”
Al inicio del período electoral el escenario era una coalición de la oposición con un socio mayoritario que podría ser el Partido Nacional, en segundo lugar el candidato que ganara en el Partido Colorado, y la tercera pata era el Partido Independiente que se presenta ante la ciudadanía como una opción de centro, o de centro izquierda. Ahora esa coalición ya no es la que está arriba de la mesa. Para Ferreri, “hoy, en primer lugar está Lacalle Pou, en segundo lugar viendo las encuestas actuales, está Manini Ríos que es una derecha pseudomilitar como dijo Talvi en una entrevista. Es decir que tenemos una opción nacionalista conservadora y corporativista; y esto lo dice otro socio de la coalición que sería la tercera pata, una pata tremendamente neoliberal”, agregó Ferreri.
A criterio del asesor económico de Daniel Martínez, el rejunte de candidatos opositores “parece una coalición para la colisión” y “no tiene gobernabilidad posible”.
Por su parte, el presidente del Frente Amplio, Javier Miranda, advirtió que Lacalle Pou apuesta todas sus expectativas electorales en la idea de una coalición, “pero quiero ver con quién va a hacer ese acuerdo”.
“Quiere una coalición con Manini porque no le dan los números y el único que está de acuerdo es Sanguinetti, pero Ernesto Talvi no quiere saber nada con el excomandante”, agregó.
“¿Qué coalición puede liderar Lacalle?”, se preguntó Miranda, “si ni siquiera cuando habló de seguridad durante el debate mencionó la iniciativa Vivir sin Miedo que impulsa un líder de su propio partido, como Jorge Larrañaga”.
Javier Miranda no cree que los sectores de tradición “wilsonista” del Partido Nacional que acompañan a Larrañaga estén conformes con una coalición de ultraderecha.
“¿Van a acompañar a un Lacalle que los ningunea, que los ignora, pero que además está dispuesto a aliarse con la ultraderecha, con los sectores más reaccionarios de la sociedad, con el neoliberalismo del sanguinettismo de Talvi? ¿Están dispuestos a aliarse con la ultraderecha de Manini? Creo que hay que pensarlo un poquito”, remarcó el titular del FA.
Mieres y Talvi, en disidencia
Desde la oposición, quien puso límites a un eventual acuerdo opositor fue el independiente Pablo Mieres.
Según el senador, con Manini Ríos “hay una distancia muy grande” por lo que resulta muy difícil “integrar una coalición con Cabildo Abierto porque tenemos diferencias ideológicas”.
“Manini usó un cargo de confianza para preparar una candidatura presidencial” lo cual “es actuar sin rectitud, violando las normas jurídicas y éticas”. “Hoy descarto sentarme en una mesa a armar un acuerdo”, añadió.
También Ernesto Talvi descartó una posible alianza con Manini, y solo acepta sentarse a negociar con el Partido Nacional y el Independiente. “Esos son los comensales que tienen que estar sentados a la mesa porque somos quienes tenemos una trayectoria, un programa, un proyecto completo de país”, explicó el colorado.
De esta manera tachó de plano a Cabildo Abierto considerándolo un “partido nuevo con propuestas programáticas escuetas, y a veces muy parciales”.