Al comprar divisas los argentinos deberán pagar un adicional de 30 por ciento
El nuevo tributo sobre turismo en el exterior, atesoramiento y compra de bienes o servicios con moneda extranjera regirá por cinco años. El impuesto del 30 por ciento del dólar turista se extenderá por cinco años también para la compra del billete, según informó ayer el ministro de Economía, Martín
Guzmán, al presentar los principales lineamientos del proyecto de ley de Solidaridad Social y Reactivación Productiva. Hasta el momento se especulaba con que el recargo cayera solo para las compras con tarjeta en moneda extranjera, pero en el proyecto se aclara que también alcanza a la adquisición de billetes para atesoramiento, limitada por el cepo que dejó Mauricio Macri a 200 dólares mensuales. Quedarán exceptuados del impuesto los gastos referidos a prestaciones de salud, compra de medicamentos, adquisición de libros en cualquier formato y utilización de plataformas educativas, entre otras. Tampoco aplicará para las importaciones. La AFIP será el agente de retención. El impuesto del 30 por ciento se aplicará en todo el territorio de la Nación para la compra de billetes y divisas en moneda extranjera, incluidos cheques de viajero, para atesoramiento o sin un destino específico vinculado al pago de obligaciones. En este caso se incluye a los 200 dólares que se pueden comprar por mes. También se cobrará sobre el cambio de divisas efectuado por las entidades financieras por cuenta y orden del cliente para comprar bienes o adquirir prestaciones y locaciones de servicios efectuadas en el exterior que se cancelen mediante la utilización de tarjetas de crédito. El banco será encargado de retener el 30 por ciento sobre el tipo de cambio. Además, resultan incluidas las compras efectuadas a través de portales o sitios virtuales y/o cualquier otra modalidad por la cual las operaciones se perfeccionen, mediante compras a distancia, en moneda extranjera, tales como Amazon, Ebay y Alibaba. Se incluye en el proyecto el pago por servicios prestados por no residentes en el país, que se cancelen mediante la utilización de tarjetas de crédito, como Spotify, Netflix, Youtube, Apple TV, HBO Go y Tinder. También la adquisición de servicios a través de agencias de viajes y turismo del país y de servicios de transporte terrestre, aéreo y por vía acuática, de pasajeros con destino fuera del país. La medida se toma con carácter de emergencia por el término de cinco años a partir del día en que se promulgue la ley elevada al Congreso. Pero Guzmán aclaró que se podría modificar si las condiciones mejoran, para lo cual estará facultado el Poder Ejecutivo por la misma ley.