Parecía un día normal (aunque no lo sea), con mucha gente en las calles
Montevideo vivió un fin de semana con mucha gente en los espacios públicos, con la Rambla como en sus mejores tiempos, y los montevideanos olvidándose de la cuarentena.
Los uruguayos ya resolvieron dejar la cuarentena atrás. Este fin de semana, la ciudad se llenó de gente en los lugares de esparcimiento. La Rambla parecía la de un día cualquiera. De aquellos cuando el coronavirus no tenía al mundo y al país en jaque, y las autoridades no pedían por todos los medios posibles que te quedaras en casa.
El sábado y domingo todo el que pudo salir, salió. Las tardes cálidas y soleadas fueron una tentación que muy pocos lograron resistir. Y la tan temida aglomeración no tuvo otro límite que el de guardar el metro y medio de distancia (siempre que se podía).
Parecía una contradicción escuchar por las radios los mensajes reiterados impulsando el aislamiento social, como única“vacuna”para combatir el virus.
Y quedaban fuera de contexto las filas que algunos supermercados exigían para ingresar “de a uno en uno”, para hacer las compras sin mayores contactos.
Si la idea es “abrir el grifo” de a poco, para recuperar el ritmo de una ciudad normal, este fin de semana se abrió de más.
Ni siquiera se entendía la imagen de algunos espacios públicos cerrados con vallas, como áreas recluidas, mientras el movimiento de gente alrededor tenía el mismo dinamismo de cualquier día sin pandemia.
Algunos corriendo, otros tomando mate, o en bicicleta, los montevideanos “escaparon” del encierro y salieron a disfrutar del sol y de la temperatura agradable, sin reparos.
Parecía que el “miedo” al Covid-19 ya quedó atrás y que otra vez volvíamos a ser“el país del milagro”, el único que no vive las angustias y temores, que llevaron a nuestros vecinos a la cuarentena total que tiene las calles vacías y a las autoridades controlando para que nadie viole el aislamiento social obligatorio.