La Republica (Uruguay)

Peñarol satisfecho pero conservado­r; Nacional guarda la esperanza para la vuelta

El primer clásico por Sudamerica­na dejó un panorama muy distinto para ambos equipos.

- Redacción

Peñarol venció 2-1 a Nacional en el Gran Parque Central en lo que fue el partido de ida por los octavos de final de la Copa Sudamerica­na. El “carbonero” fue superior a su rival y lo plasmó en el marcador, sin embargo, el gol sobre la hora de Gonzalo Bergessio le da la esperanza de remontar al“tricolor”en la vuelta. El capitán “manya”, Walter Gargano, destacó en rueda de prensa el partido de su equipo y reconoció las dificultad­es que representa el rival. Dijo: “Sabemos que Nacional tiene grandísimo­s jugadores que cuando entran en conexión se nos hace bastante difícil marcarlos. Contrarres­tamos muy bien, fue un partido donde nosotros tuvimos muchas virtudes”. “Estuvimos muy aplicados, que fue lo que nos pidió el míster y tratamos de manejar la pelota con mucha tranquilid­ad, pero con mucha atención siempre”, enfatizó. Gargano destacó que, pese al transcurso del partido, no cree que el resultado fuese menos abultado de lo que debió ser. “Nosotros veníamos con la conciencia de que podíamos hacer gol. No nos sentimos tan superiores, fue un partido muy parejo, somos consciente­s de las armas que tienen ellos”.“No fue un partido perfecto, 1-2. Hay que ser humildes, hay que reconocer que tienen su juego. Sí, manejamos mejor la pelota, pero terminamos sufriendo un encuentro que no merecía sufrirse”, culminó.

Triunfo con valor histórico

El director técnico de Peñarol, Mauricio Larriera, analizó la victoria y resaltó el valor histórico de la misma. “Este triunfo vale mucho porque es un partido histórico a nivel mundial. Es uno de los clásicos más antiguos del fútbol y ganar de visita en un partido internacio­nal nos da la confianza suficiente para seguir trabajando como se viene haciendo. Tiene un valor especialme­nte histórico, nosotros queremos colaborar con más historia para este gran equipo que es Peñarol”, aseguró. “Nosotros veníamos con buena actitud, sobre todo a nivel de Sudamerica­na. Tal vez sea jugar este tipo de torneo lo que nos devolvió esa actitud. A nivel de Torneo local no es que no hubo actitud, sino que no pudimos reconstrui­r el equipo. En un momento se nos complicó por distintos motivos. Hoy redondeamo­s un partido muy bueno en todas las facetas de juego”, añadió. Sobre el cambio con respecto al encuentro anterior, Larriera indicó que no vio una transforma­ción tan grande. “El clásico anterior fue mucho más parejo de lo que el resultado dijo. Nunca creí que el rival mereciera ganar y mucho menos por dos goles de diferencia” dijo y completó: “Esta es otra competenci­a. Es un matamata, no se puede comparar. “El grupo siempre ha estado muy bien, es un grupo muy bueno, unido, noble y comprometi­do con todo lo que proponemos. Ganar de visitante en un clásico fortalecer­á la confianza del grupo. Siempre con los pies sobre la tierra, ya que la llave no está cerrada”, concluyó.

Nos veremos en siete días

El entrenador tricolor, Alejandro Cappuccio, admitió el mal funcionami­ento de su equipo, pero destacó que la llave aún no se sentenció. “No encontramo­s la mejor versión del equipo hoy, pero por ser una serie podemos decir que estamos en la mitad y el gol del final es una esperanza de tener una mejor versión en la revancha y poderlo dar vuelta”, afirmó. “Tenemos que mejorar muchos aspectos, en especial los colectivos, donde hoy no estuvimos nada finos”, dijo en cuanto a los cambios necesarios de cara a la vuelta. Cappuccio aseguró que no sintió sorpresa por lo que hizo el rival y valoró el gol de su capitán. “No me sorprendió la postura de Peñarol hoy. En cuanto al gol de Bergessio, creo que es un gol muy importante porque acorta la diferencia, más allá de que tenemos que anotar dos goles igual, no es lo mismo 2-0 que 2-1. Estamos vivos y nos veremos en siete días para la vuelta”, manifestó.

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