Kechichian y la dimensión humana de Vázquez
La senadora Liliam Kechichian (Alianza Progresista-738), quien fuera secretaria de Turismo de las administraciones frenteamplistas, indicó que sería imposible calibrar la dimensión humana de Tabaré Vázquez sin conocer su historia.
Siendo la primera oradora, Kechichian abordó tópicos que luego resultaron también aludidos en otras intervenciones: la infancia humilde en el barrio de La Teja, hijo de un obrero de Ancap, que vio morir de cáncer al padre y otros miembros de la familia.
Por su origen humilde y situación familiar, Tabaré Vázquez tuvo diversos empleos hasta que ingresó a Carrau y Compañía, en que además de trabajar, le permitió comenzar sus estudios en Facultad de Medicina, como lo alentaba su mujer María Auxiliadora Delgado, “Mari”.
Los códigos de barrio, la experiencia de surgir de una clase media de obreros, trabajadores y pequeños empresarios, hizo que Tabaré Vázquez tuviera, en interpretación de
Kechichian, la posibilidad de introducir un rasgo humanista en su gestión.
Evocó cómo estuvo al frente del Club Arbolito y de la policlínica barrial, que llegó a atender a 400 personas al día. Su trayectoria como dirigente en el Club Atlético Progreso que le dejó una etapa histórica a la institución y que le valió que se manejara su nombre como presidente de la Asociación Uruguaya de Fútbol, lo cual no se concretó.
Además, recordó que ingresó al Partido Socialista, del que terminó siendo dirigente, para luego ser tesorero de la Comisión Nacional pro Referéndum de la Ley de Caducidad, para llegar, a los pocos meses, a ser el primer intendente de izquierda en Montevideo.
Añadió que Tabaré Vázquez fue luego presidente del Frente Amplio y del Encuentro Progresista, para llegar a la presidencia de la República, demostrando su condición humanista creando el Ministerio de Desarrollo Social y el Plan de Asistencia Nacional a la Emergencia Social (Panes).
Por su parte, el senador Enrique Rubio manifestó que la "impronta de Tabaré perdurará como una marca profunda en la historia nacional, como ha perdurado la impronta de todos los que hicieron grandes transformaciones como sucedió con unos pocos políticos destacados en los últimos dos siglos". Destacó que Vázquez posibilitó la "discontinuidad política" apoyándose y conduciendo una fuerza histórica que está cumpliendo sus cincuenta años y cuyos orígenes se remontan a fines del siglo XIX y principios del siglo XX y afirmó que "su originalidad no radica tanto en el programa que asumió sino en la obra, en la capacidad de realización histórica". "En otros términos, en la ruptura del bipartidismo y en la conversión de la misma en victoria política y en proyecto histórico en proceso de realización", afirmó. Por otra parte, dijo que "la audacia fue un componente clave de su hacer político" y agregó que "supo como pocos que el poder radicaba en la gente". "Puede parecer una obviedad mayúscula pero ponerlo en práctica no es nada sencillo. Tabaré pudo".