Adelante Valle

Los nuevos héroes del Valle

- REDACCIÓN

IMPERIAL — El pasado 8 de agosto, Elizabeth Ramírez y Héctor Raúl Macedo, viajaban en sus respectivo­s vehículos a la Prisión Estatal de Calipatria donde ambos laboran desde hace 23 y 8 años, respectiva­mente.

En el trayecto, Ramírez observó una columna de humo en lo que parecía ser un accidente de tránsito.

Poco después, Macedo se detuvo para auxiliar a la automovili­sta herida.

Debido a su complexión, Macedo se incorporó al Río Nuevo para intentar extraer el cuerpo lesionado e inconscien­te de Kathryn Dunn, quien estaba al borde de perder la vida ahogada, ya que su vehículo terminó con las llantas viendo al cielo.

Mientras alzaba el cuerpo de la conductora, Macedo tardó varios minutos para poder desactivar el cinturón de seguridad.

Al final, el elemento del Departamen­to de Correccion­es y Rehabilita­ción de California logró sacar a Dunn del vehículo y del agua.

Por haber salvado la vida de la conductora, los dos miembros del CDCR recibieron este jueves 30 de marzo un Certificad­o de Reconocimi­ento de manos del Jefe de la División Fronteriza de la Patrulla de Caminos de California, Tommy Cocroft.

“Este es el más alto honor que se puede otorgar a un civil”, dijo Cocroft en la ceremonia, quien afirmó que la corporació­n estatal no dudó un solo momento en entregar el reconocimi­ento.

“Es una bendición estar aquí”, comentó Dunn entre lágrimas en la ceremonia, a la que acudieron amigos y familiares de los tres involucrad­os en el incidente de agosto.

Antes del evento oficial, Dunn conoció por vez primera a quienes le salvaron la vida.

Dunn ha residido en Calipatria junto a su hijo Robert toda su vida. El camino en el que ocurrió el accidente lo ha cruzado una y otra vez desde hace casi seis décadas, según dijo en el evento.

Apoyada por un bastón para caminar tras el accidente, Dunn agradeció a los presentes, a quienes pidió respeto por los agentes estatales.

“Gracias a todos. Es un placer conocerlos”, agregó.

Además, Dunn pidió a los presentes rezar por los demás.

“Si tienen una segunda oportunida­d como yo, aprovéchen­la”, dijo Dunn, quien aseguró haber pensado que jamás iba a volver a caminar en su vida.

“Hubo alguien que me salvó. Algunas veces Dios pone cosas que uno necesita. Esto me salvo la vida y lo aprecio”, añadió.

Dunn terminó su discurso al destacar: “Los amo. Dios los bendiga”.

“No la piensen. Cuando miren algo así, que ayuden”, dijo Ramírez en entrevista, al invitar a la población a auxiliar a los automovili­stas que se encuentren en peligro.

“Gracias a Dios nos tocó a mí y a mi compañero que le salvamos la vida a alguien”, agregó Ramírez, al expresar su alegría por haber rescatado con vida a Dunn.

“Puede ser alguien muy querido el milagro que le pueden hacer a una familia”, añadió.

“Es importante que los actos heroicos y valientes que Ramírez y Macedo mostraron el día de este evento no pasen desapercib­idos.

“La cantidad de valentía que se necesitó para arriesgar sus vidas por el bienestar de Dunn es ejemplar”, dijo el Capitán Shipwash de la CHP de El Centro

En el evento, Macedo y Ramírez recibieron un reconocimi­ento por parte de representa­ntes del Asambleist­a, Eduardo García.

 ?? ARTURO BÓJORQUEZ/ADELANTE VALLEA ?? Elizabeth Ramírez (derecha) y Héctor Raúl Macedo (izquierda), quienes trabajan para la Prisión Estatal de Calipatria, reciben el jueves un Certificad­o de Reconocimi­ento (el más alto optorgado a civiles en California) de parte de la Patrulla de Carreteras de California por haber salvado la vida de Kathryn Dunn, residente de Calipatria (al centro) después de un accidente automovilí­stico cerca de Calipatria en agosto.
ARTURO BÓJORQUEZ/ADELANTE VALLEA Elizabeth Ramírez (derecha) y Héctor Raúl Macedo (izquierda), quienes trabajan para la Prisión Estatal de Calipatria, reciben el jueves un Certificad­o de Reconocimi­ento (el más alto optorgado a civiles en California) de parte de la Patrulla de Carreteras de California por haber salvado la vida de Kathryn Dunn, residente de Calipatria (al centro) después de un accidente automovilí­stico cerca de Calipatria en agosto.
 ?? VALLE ARTURO BÓJORQUEZ/ADELANTE ?? Héctor Raúl Macedo y Kathryn Dunn se abrazan tras conocerse por primera vez. Macedo, junto con Elizabeth Ramírez, quienes trabajan para la prisión estatal de Calipatria, salvaron la vida de Dunn después de un accidente automovilí­stico cerca de Calipatria en agosto. Ramírez y Macedo recibieron el jueves un Certificad­o de Reconocimi­ento (el más alto para civiles en California) de parte de la Patrulla de Caminos de California por sus actos heroicos.
VALLE ARTURO BÓJORQUEZ/ADELANTE Héctor Raúl Macedo y Kathryn Dunn se abrazan tras conocerse por primera vez. Macedo, junto con Elizabeth Ramírez, quienes trabajan para la prisión estatal de Calipatria, salvaron la vida de Dunn después de un accidente automovilí­stico cerca de Calipatria en agosto. Ramírez y Macedo recibieron el jueves un Certificad­o de Reconocimi­ento (el más alto para civiles en California) de parte de la Patrulla de Caminos de California por sus actos heroicos.
 ?? VALLE ARTURO BÓJORQUEZ/ADELANTE ?? Elizabeth Ramírez y Héctor Raúl Macedo (detrás de Ramírez), quienes trabajan para la Prisión Estatal de Calipatria, reciben el jueves un Certificad­o de Reconocimi­ento (el más alto para civiles en California) del Jefe de la División Fronteriza de la Patrulla de Carreteras de California, Tommie Cocroft, por haber salvado la vida de Kathryn Dunn, residente de Calipatria, después de un accidente automovilí­stico cerca de Calipatria en agosto.
VALLE ARTURO BÓJORQUEZ/ADELANTE Elizabeth Ramírez y Héctor Raúl Macedo (detrás de Ramírez), quienes trabajan para la Prisión Estatal de Calipatria, reciben el jueves un Certificad­o de Reconocimi­ento (el más alto para civiles en California) del Jefe de la División Fronteriza de la Patrulla de Carreteras de California, Tommie Cocroft, por haber salvado la vida de Kathryn Dunn, residente de Calipatria, después de un accidente automovilí­stico cerca de Calipatria en agosto.

Newspapers in Spanish

Newspapers from United States