Ex soldado acusado de homicidio sí padece estrés postraumático: especialista
Ayer durante el juicio contra Alberto Mendiola, un psiquiatra por parte de la defensa contradijo la declaración del psicólogo Timothy Proctor, argumentando que éste sí presenta un severo cuadro de estrés postraumático (PTSD).
El último testigo en subir al estrado fue el psiquiatra Arthur Ramírez, quien aseguró que Mendiola no padece PTSD “provisional” como afirmó Proctor, o en otras palabras, que el ex militar nunca exageró sus síntomas.
Ramírez dijo que Mendiola mató a Anthony Bowler de 30 años, porque esa noche “sufrió una disociación”, lo que significa que entró en crisis y ante “sus ojos” dar muerte al hombre “no estaba mal”.
El psiquiatra en todo momento atribuyó este padecimiento a las experiencias traumáticas que Mendiola vivió cuando en la guerra de Afganistán en 2009.
‘Siempre ha sido violento’
Por su parte, la Fiscalía no acepta la versión de la defensa que indica que Mendiola abrió fuego y mató a Bowler a causa del PTSD.
“Siempre ha sido violento” dijo la fiscal, argumentando que el acusado cuenta con un marcado historial de violencia que data antes de que se enlistara en el ejército.
Y es que la Fiscalía presentó ante el jurado documentos que indican que desde temprana edad Mendiola maltrataba animales y también demostraron que estuvo involucrado en más de 20 peleas durante sus años en high school.
Además, antes de la noche del homicidio, su ex esposa había interpuesto una orden de restricción, ya que durante una pelea el ex soldado le quebró las costillas.
Tiene problemas de adicción
La fiscal también mencionó que aparte de ser una persona violenta, Mendiola tiene serios problemas con el consumo de alcohol y drogas, basando este argumento en exámenes realizados al acusado, donde se demostró que Mendiola consumía mariguana.
Así como también le recordó a los presentes en la corte que la noche en que el ex soldado disparó contra Bowler, éste se encontraba bajo los influjos del alcohol.
Se espera que el próximo lunes la fiscalía y la defensa presenten sus argumentos finales ante la Corte del distrito 168 que preside el juez Marcos Lizárraga.