TOMA NOTA
Evita viajar en horas de mucho sol (11 am – 4 pm), que es cuando el calor es más fuerte, por lo que, si puedes, sería conveniente madrugar y emprender los viajes a primera hora de la mañana, alrededor de las 6:30, ya que son las horas más “frescas”.
La temperatura interior de tu auto debería estar entre 19 y 24ºC, para ello debemos programar el climatizador o aire acondicionado antes empezar a desplazarnos.
Para que el consejo anterior tenga efecto asegurémonos de que el aire acondicionado funcione perfectamente. Si no disponemos de climatizador, cuando menos hay que bajar las ventanillas para evitar que el interior del auto se recaliente.
Si el automóvil ha estado un largo periodo expuesto al sol, antes de emprender la marcha hay que ventilarlo bien, para no respirar los gases tóxicos producidos por el calentamiento de las piezas de plástico del interior del coche, así como evitar un golpe de calor al comienzo de la conducción. No hay que olvidar que un coche expuesto al sol puede aumentar su temperatura interior con respecto al exterior entre 5 y 15 grados centígrados.
Llevar bebidas frías para hidratarse, si es posible agua y algunas frutas.
Hacer paradas frecuentes, por lo menos cada dos horas.
Realizar comidas ligeras, evitar en lo posible comidas muy grasosas y pesadas, preferentemente consumir ensalada, fruta y pasta.
Protegerse del sol mientras conducimos, usando gafas polarizadas, e incluso gorra si vamos en convertibles, así como cremas de protección solar en este último caso.