En declive, detenciones de integrantes de pandilla MS-13
Austin, Texas – El gobernador de Texas Greg Abbott enfatiza la amenaza de la banda transnacional MS-13 para explicar por qué las tropas de la Guardia Nacional solicitadas por el presidente Donald Trump son necesarias en la frontera con México.
Trump justificó su llamado a un muro fronterizo y la represión de la inmigración ilegal en parte debido a la necesidad de detener a la MS-13, una pandilla viciosa considerada responsable de asesinatos en ciudades de Estados Unidos. Pero sellar la frontera por completo no eliminaría a la pandilla. Fue fundada en Estados Unidos en la década de 1980 por inmigrantes salvadoreños y tiene raíces profundas en el país. Algunos de sus miembros son ciudadanos norteamericanos y no están sujetos a la deportación ni a la imposición de la frontera.
Una mirada a la declaración de Abbott y la compleja realidad detrás de ella
ABBOTT: "Sorprendentemente, e inquietantemente, ha habido un aumento de más del 200 por ciento de la MS-13 cruzando la frontera", dijo Abbott durante una visita a las tropas de la Guardia Nacional en Weslaco, Texas, el 12 de abril.
LOS HECHOS: Es cierto que las aprehensiones de MS-13 han aumentado después de varios años de declive. Abbott, un republicano, estaba hablando en el Valle del Río Grande, el sector más activo de la frontera sur, y su referencia al fuerte aumento fue para esa área. Para ese sector, el aumento en aprehensiones de MS-13 es aún mayor de lo que dijo Abbott, casi 300 por ciento en los seis meses hasta marzo, según datos de la Patrulla Fronteriza. Pero las cifras son pequeñas, 123 detenciones de miembros de la MS-13 de las más de 66 mil aprehensiones en ese sector durante ese tiempo. A nivel nacional, la Patrulla Fronteriza dice que 181 de sus arrestos fueron miembros de pandillas MS-13 durante el mismo período de seis meses. Hasta este año, las aprehensiones de MS-13 habían disminuido gradualmente de 437 en 2014. Si la tasa actual de aprehensiones de MS-13 continúa otros seis meses, el número total para el año revertiría esa tendencia, pero no superaría el 2014. Los tatuajes "son la forma más común" de que los agentes determinen si alguien está en la MS-13, aunque las entrevistas y los antecedentes también identifican a los miembros de las pandillas, dijo el portavoz de la Patrulla Fronteriza, Marcelino Medina.