Nuevas reglas causarían más muertes
Incrementarían también las emisiones
Washington – La administración Trump dio a conocer ayer los pormenores de las nuevas reglas sobre contaminación del aire que rigen a las plantas eléctricas que funcionan con carbón, admitiéndose discretamente la posibilidad de que el plan aumente las emisiones de carbono y provoque hasta mil 400 muertes prematuras al año.
La propuesta, la regla Energía Limpia Accesible, sustituiría al Plan de Energía Limpia de la era Obama, el cual constituyó un enérgico esfuerzo por dar celeridad a los cierres de las plantas donde se quema carbón, unos de los principales productores de gases generadores del efecto invernadero, estableciendo objetivos nacionales en la reducción de las emisiones de dióxido de carbono y alentando a las compañías de electricidad a recurrir a fuentes de energía más limpia, como la eólica y la solar.
En cambio, en la nueva propuesta presentada por la Dirección de Protección Ambiental (EPA) se pretenden mejoras menores en la eficiencia de las plantas individuales al tiempo que se permite a los estados suavizar reglas de contaminación del aire para las plantas de electricidad que necesiten mejoras, lo cual las mantendrá activas por más tiempo.
Funcionarios del gobierno de Trump sostienen que, en su esfuerzo por reducir las emisiones de carbono, el Plan de Energía Limpia intentó ilegalmente obligar a las compañías de luz a emplear fuentes de energía más limpia. Con el nuevo plan, aseguraron, se lograrían muchos de los beneficios que la administración Obama deseaba pero con un método legal y que brinda mayor flexibilidad a las entidades.
Sin embargo, en cientos de páginas de análisis técnico anexas a la nueva propuesta se indica que con el plan se incrementarían las emisiones.
A comparación del plan de la era Obama, en el análisis se lee, “se espera que la implementación de la regla propuesta aumente las emisiones de dióxido de carbono y los niveles de las emisiones de ciertos contaminantes de la atmósfera que tienen efectos adversos en la salud humana”.
En el análisis se incluye asimismo una sección titulada beneficios “previos” para el clima y la salud humana. O sea, en vez de mencionar lo que se gana con el plan Trump en términos de salud —prevenir muertes prematuras, por ejemplo, o evitar cierto número de aumento en el número de visitas a emergencias por ataques de asma— se describe en beneficios perdidos el efecto del plan Trump.
En el escenario con más posibilidades de ocurrir a nivel estatal, según la EPA, se pronostica que para el 2030 se registren entre 470 y mil 400 decesos prematuros debido a los índices más altos de partículas microscópicas PM 2.5 en el aire.
En el análisis de la administración Trump se determina que para el 2030 habría 48 mil más casos de asma agravado y al menos 21 mil nuevas faltas escolares anuales por aumento en contaminantes en el aire.