¿Será arena para eventos deportivos?
Activistas produranguito y Municipalidad chocan en Corte de Austin
La Tercera Corte de Apelaciones, con sede en Austin, Texas, escuchó el miércoles los argumentos orales de las partes en conflicto que apoyan o se oponen a la construcción de una arena de usos múltiples en la zona Centro de la ciudad.
La parte toral de los argumentos se enfocó en que dicha arena de usos múltiples, aprobada dentro de los bonos de calidad de vida votados en el 2012 por los electores de El Paso, no fue propuesta para realizar eventos deportivos.
“Incluso asumiendo que algunos ciudadanos de El Paso pueden resistirse a la idea de que el deporte es entretenimiento, o que creen que los deportes deberían haber sido nombrados específicamente en la ordenanza y boleta electoral, la ley otorga a la Ciudad discreción para hacerlo”, dijo el abogado William Jefferson, en representación de la Ciudad de El Paso.
La situación provocó controversia por parte de grupos a favor de la conservación, que ponderan la importancia histórica de la zona donde se construiría dicho inmueble.
La abogada Lisa Bowlin Hobbs, en representación del historiador Max Grossman, sostuvo que la Ciudad engañó deliberadamente a los votantes al excluir dichos términos de la propuesta que se presentó en la boleta electoral. “No es razonable decirle a los votantes que se va a construir un centro de artes escénicas, y luego se decida que se va a construir una arena de baloncesto”, afirmó Hobbs.
Los argumentos que el grupo conservacionista esgrime, en su intención de evitar la demolición del vecindario Union Square (llamado también Barrio Duranguito), subrayan el hecho de que la zona tiene importancia histórica, y que en la aprobación de los bonos de calidad de vida no se mencionó la intención de utilizar dicha arena para uso deportivo, en lugar de los propuestos con fines culturales y de entretenimiento.
“La Ciudad argumentó que el término ‘entretenimiento’ debe interpretarse en términos generales e incluso podría incluir una taberna o un casino”, anotó Max Grossman, catedrático de la Universidad de Texas en El Paso, y vocal de la causa en defensa del Barrio Duranguito.
“Es extremadamente importante que se reafirme la voluntad de los electores”, dijo Grossman al finalizar la audiencia en la Tercera Corte de Apelaciones.
“Cuando los electores emiten su voto sobre una medida que está en las boletas electorales, y que tienen frente a ellos, ellos esperan que lo que votaron sea realizado. Nada más y nada menos”, afirmó Grossman sobre los términos ambiguos que se utilizaron en la aprobación de los bonos de calidad de vida del 2012.
Una vez que ambas partes en conflicto realizaron sus argumentos orales, la Corte emitirá una decisión al respecto, misma que se espera al final del presente mes.
El proyecto de la arena de usos múltiples, que cuenta con un presupuesto de 473 millones de dólares, es el más grande dentro de los bonos de calidad de vida, y que sin embargo, ha sido detenido tras el litigio.
Del mismo modo vecinos del lugar, junto con un importante respaldo de grupos conservacionistas, esperan la declaración oficial de la Comisión Histórica de Texas sobre la importancia de dicho sitio, de algunos de sus inmuebles y por posibles hallazgos arqueológicos en el subsuelo.
En un dictamen dado a conocer el 3 de julio y otorgado por la jueza Amy Clark Meachum, se impide al Gobierno de El Paso firmar nuevos contratos relacionados con la adquisición de terrenos, la demolición o el inicio de una nueva construcción en cualquiera de las propiedades localizadas en el sitio propuesto para la arena.
“Este tribunal encuentra una buena causa para entrar en la orden... (y) por lo tanto, ordena que se prohíba a la Ciudad de El Paso, a sus agentes, empleados, contratistas y abogados: ingreso de nuevos contratos relacionados con la adquisición, demolición, rehabilitación o edificación de nueva construcción en el barrio de Duranguito”, consta en la orden girada por la jueza Clark.
Adicionalmente, el 18 de julio del 2017 la jueza Clark Meachum dictaminó que la Ciudad de El Paso puede utilizar 180 millones del bono de calidad de vida, pero que el inmueble a construir no podrá ser empleado para realizar eventos deportivos.
Este es sólo uno de los 3 frentes legales que enfrenta este litigio, que comprende el caso promovido por el historiador Max Grossman, quien sostiene que la Ciudad de El Paso viola el Código de Antigüedades de Texas al no notificar a la Comisión Histórica de Texas de sus planes de demoler estructuras históricas en la zona donde se planea construir la arena.
Sin embargo, la Ciudad de El Paso sostiene haber emitido un aviso al cuerpo colegiado el mes de mayo, que es el eje de su defensa para desechar el caso, en un proceso legal que no tiene fecha para una nueva audiencia en una corte de Fort Worth.
Otro recurso legal de los conservacionistas es pedir que los ciudadanos voten a favor o en contra de la continuación de la construcción de la arena de usos múltiples al momento que se declare a Duranguito como de importancia histórica, y que se pretende que 12 inmuebles de la zona sean clasificados como sitios históricos protegidos por el Estado.
Tampoco hay fecha para el siguiente capítulo de este litigio, al momento que se realizarán excavaciones en la zona, con el fin de sostener el caso de quienes buscan impedir la construcción de la arena de usos múltiples. (Roberto Carrillo / El Diario de El Paso)