Oficial: Censo 2020 no cuestionará ciudadanía
Defensores de derechos civiles claman victoria vs Trump
Washington— La administración Trump está dejando a un lado los planes de agregar la pregunta sobre la ciudadanía en el Censo del 2020, según confirmó este martes el Departamento de Justicia, justo días después que la Corte Suprema describió la razón por la que la pregunta es “artificiosa”.
La decisión de retractarse de la controvertida pregunta fue una victoria para los activistas que están a favor de los derechos civiles, y que están preocupados de que el cuestionamiento podría dar lugar a un conteo inexacto de comunidades de inmigrantes que podrían distorsionar la representación política y el financiamiento federal.
“A la luz de la decisión de la Corte Suprema, el Gobierno no tuvo otra opción que proceder con la impresión de los formatos del Censo del 2020 sin la pregunta sobre la ciudadanía. Todos los que viven en Estados Unidos cuentan en el censo, y la decisión del día de hoy significa que todos lo haremos”, comentó el abogado Dale Ho, de la Unión Americana de Libertades Civiles, quien argumentó el caso de la Corte Suprema.
Washington— El destino de la pregunta ha sido objeto de una lucha legal y política desde marzo del 2018, cuando el secretario de Comercio Wilbur Ross anunció que planeaba agregarla al sondeo decenal, desatando media docena de demandas de Estados, ciudades, grupos de derechos civiles y otros más.
Justo la semana pasada, el presidente Donald Trump respondió al fallo de la Suprema Corte bloqueando temporalmente la pregunta al decir que trataría de retrasar el censo para darle tiempo a los funcionarios de la administración para que dieran una mejor explicación de la razón por la que se debería incluir la pregunta sobre la ciudadanía.
Trump expresó su desconfianza nuevamente el día de ayer de que “no nos permitan preguntar si alguien es ciudadano estadounidense”.
“Así que, estamos tratando de hacer eso”, dijo en una entrevista con Politico.
En lugar de eso, abogados del gobierno notificaron a través de un
correo electrónico a los que cuestionaron la pregunta planeada para ser incluida en el censo, acerca de la decisión que tomó la administración de proceder sin ella.
Inmediatamente después que la Suprema Corte decidió en contra de la administración, funcionarios del Departamento de Justicia dijeron en privado que decidieron que no tendrían otra opción sino eliminar la pregunta del censo del 2020.
Eso se debe a que la imprenta tenía una fecha límite que estaba a unos días de cumplirse, y los funcionarios sabían que no hay manera que un proceso de la corte pueda resolver favorablemente para ellos antes de la fecha límite, de acuerdo a personas que están enteradas del asunto y que hablaron de manera anónima para discutir ese litigio que aún está pendiente.
Cuando Trump publicó un tuit de que trataría de retrasar el censo, algunos funcionarios del Departamento de Justicia quedaron perplejos, dijeron, debido a que tal medida podría ser legalmente imposible.
“Tengo que pensar en que prevalezca la cordura con respecto a la increíble disrupción a nuestra democracia representativa que el retraso del censo podría haber causado”, comentó Terri Ann Lowenthal, ex directora de staff del Subcomité de Supervisión del Censo de la Cámara.
“Dudo que alguien de los Departamentos de Justicia o Comercio pudiera encontrar la manera de superar los obstáculos constitucionales y reglamentarios”.
Los críticos de la pregunta, incluyendo algunos dentro del Buró del Censo, dijeron que podría causar un conteo inexacto de millones de personas de las comunidades de inmigrantes que tendrían miedo de regresar el formato, dando lugar una imprecisión que podría sesgar la representación y distribución a favor de las áreas republicanas.
El gobierno dijo que necesitaba incluir la pregunta con el fin de reforzar el Decreto de Derecho al Voto y Ross le comentó inicialmente al Congreso que decidió agregarla en respuesta a la petición realizada por el Departamento de Justicia en diciembre del 2017.
Sin embargo, los documentos que fueron dados a conocer en las demandas sugirieron que Ross estaba presionando desde meses antes, y que también presionó al Departamento de Justicia para que hiciera la pregunta.
En su decisión que tomó el jueves, la Suprema Corte dijo que las agencias federales debían ofrecer “una justificación genuina de sus decisiones importantes, razones que pueden ser escudriñadas por las cortes y el público interesado”, escribió el juez John Roberts Jr., en una sección de su opinión a la que se unieron cuatro jueces liberales de la corte.
La información del censo, que cada hogar de Estados Unidos tiene que proporcionar, es utilizada por negocios y por el gobierno para destinar cientos de millones de dólares de gasto federal anual, también es usada para determinar la distribución y redistritación congresista.