Les impiden curar a niños migrantes
Pediatras locales lanzan un ‘S.O.S.’ a autoridades federales
Frustrados ante la imposibilidad de proveer atención médica oportuna –antes de que sea demasiado tarde– a las familias en busca de refugio en EU y que son liberadas por autoridades migratorias, cuatro médicos paseños lanzaron un grito desesperado de ayuda.
Lo único que piden es que se les permita el acceso a las instalaciones en las que son detenidos, tanto por la Patrulla Fronteriza (USBP) o por la Oficina de Aplicación de Leyes de Inmigración y Aduanas (ICE), en vez de esperar a que ya se encuentren en los albergues que administra Casa Anunciación.
“Hemos pedido acceso, constantemente, y la respuesta es recurrente: ‘No’. La política es no darnos acceso”, dijo el doctor José Manuel De la Rosa en conferencia de prensa.
Tanto De la Rosa como sus colegas Lisa Ayoub-rodríguez, Carlos Gutiérrez y Blanca García han brindado atención médica a familias de refugiados.
Sin ayuda estatal ni federal, El Paso ha podido brindar una mano amiga a estas personas”
Dr. José Manuel De la Rosa
El problema es que, desde hace un año, cuando había miles de niños detenidos en Tornillo, a los médicos se les negaba el acceso a las instalaciones para proveerles servicios de salud. Como consecuencia de estas políticas, que ahora se repiten en el centro de detención de la USBP en Clint, han muerto por lo menos cuatro menores bajo custodia federal en la región: muertes que se hubieran evitado.
El pediatra Carlos Gutiérrez ha prestado sus servicios de forma voluntaria para niños migrantes desde el año 2014, cuando una ola de migrantes similar llegó a esta frontera.
“En ese tiempo íbamos y esperábamos a que bajaran de los autobuses, les prestábamos servicios y todo funcionaba muy bien con las autoridades, luego esta ola bajo, bajaron los números hasta que oímos de la ciudad de ‘tiendas de campaña’ en Tornillo”, expresó Gutiérrez.
Dijo que se habían pedido permisos especiales a las autoridades federales para ir a prestar servicios de salud al centro de detención de menores en Tornillo el año pasado, sin embargo este fue denegado.
El centro de Tornillo contaba con un contrato de una organización fuera de El Paso que tenía sus propios médicos y personal de salud.
“Les preguntamos: ¿podemos ir? Pero nos dijeron: ‘no necesitamos su ayuda’. Entonces les pedimos que si podíamos visitarlos por lo menos para saber qué tipo de atención médica se les daba y tampoco nos lo permitieron”, dijo Gutiérrez.
Ayuda ejemplar
El doctor De la Rosa felicitó la comunidad de El Paso por el apoyo hacia la comunidad migrante. “Sin ayuda del estado, ni federal, El Paso ha podido brindar una mano amiga a estas personas que han pasado por tanto para poder estar aquí”, comentó.
Dijo que la atención médica de pediatras es de suma importancia en las familias migrantes.
“Aunque nuestros colegas médicos o los oficiales presten ayuda, no cuentan con el entrenamiento necesario para poder atender a un niño. Tenemos enfermedades que son desde un simple resfriado o dolor de estomago, hasta casos de varicela o influenza”, comentó el doctor.
No piden ayuda por miedo
Las familias que vienen en busca de asilo político en los Estados Unidos es una población que les da temor o pena pedir por ayuda, por eso es indispensable estar ahí para ellos y preguntar con qué se les puede ayudar, declaró la pediatra Lisa Ayoub-rodríguez.
“Hubo una vez que un niño estaba muy enfermo, tenia fiebre muy alta y le pregunté a su madre que si no les había pedido ayuda a los oficiales y me contestó: “es que no quería molestarlos”, dijo la doctora.
Blanca García, pediatra de El Paso, compartió una anécdota que para ella, ha sido una de las más significantes en su carrera como profesional de la salud.
“Uno de los niños que vimos hace dos meses atrás, tenía una fiebre muy alta, cuando los sacamos de la clínica estaba impresionada de lo enfermo que estaba y cómo es que nadie notó que ese niño estaba tan enfermo, ¿porqué nadie lo notó?”, dijo García.
“Como lo hemos dicho antes, cuando tienes tanta gente ciento y cientos en custodia, es difícil darse cuenta de esto, que creo que es lo que pasó. El niño tuvo que ser hospitalizado por tres días y si este niño si hubiera estado en custodia por mas días sin atención de un pediatra se pudo haber convertido en una tragedia”, expresó la pediatra.
Con enfermedades crónicas
Aunque la mayoría de las enfermedades que se tratan suelen ser resfriados que se solucionan con medicamentos sencillos, los médicos detallaron que se han topado incluso con menores con enfermedades crónicas.
En el mes de octubre, los médicos paseños fueron llamados por las autoridades para revisar a un grupo de 200 personas que fueron liberadas por ICE en la estación de autobuses en el Centro de El Paso.
“La mitad de ellos con altos niveles de deshidratación, vomito, diarrea, inmediatamente nos movimos a darles atención médica y ese día recuerdo algo que de verdad tocó mi corazón”, dijo el pediatra Gutiérrez.
Se trataba de una adolescente de 17 años quien llegó a esta frontera con su madre desde Honduras. “Me dijo que le dolía la cabeza, que se sentía muy cansada, y le dije: ¡pues claro, vienes de un viaje de más de mil millas de distancia! Un poco deshidratada pero se veía bien”, comentó el doctor.
La menor mencionó que en Honduras le había dicho algo relacionado con diabetes, “Es cuando le dije: ¿acaso tienes diabetes? Y ella me dijo: no lo sé”.
“Entonces le checamos sus niveles y su azúcar estaba en 800, la niña era una ‘bomba’ caminando. La hospitalizamos de inmediato”, comentó.
Les quitan sus medicamentos
Los doctores denunciaron que uno de los más grandes problemas que se han reportado con las autoridades, es que les revocan medicamentos que cargan con ellos.
“Me hace enojar que les quiten sus pastillas. Les quitan sus medicamentos para procesarlos pero después no se los dan o no les ayudan, entonces es cuando la gente se empieza a sentir mal”, dijo el doctor Gutiérrez.