Mujeres velan por la salud de la comunidad
Paseñas emprendedoras trabajan para llegar a los sitios marginados y promover la prevención de enfermedades
María, Rita, Cristina y Myra son mujeres que cuentan con la habilidad de promover, educar y difundir la salud para llevar a cabo la divulgación efectiva de la prevención de enfermedades dentro de las comunidades marginadas asentadas en el Condado de El Paso.
Al trabajar en equipo y desarrollar técnicas de comunicación como promotoras de la salud, su sensibilidad no se limita a la atención de grupos en cuanto a sexo o género, sino que su objetivo es empoderar a las comunidades con respeto en los aspectos culturales, de lengua, religión o raza para compartir sus conocimientos entre las poblaciones vulnerables de El Paso, San Elizario y Las Cruces con temas de salud variados.
Cada una de ellas trabaja desde su trinchera pero cuando existe alguna prioridad dentro de las comunidades no esperan atender individualmente su especialidad sino que unen sus conocimientos para trabajar en equipo bajo un abanico de temas de salud que se van presentando a lo largo de cada año.
“Al ver tanta necesidad y marginación en nuestras comunidades no podíamos hacer otra cosa sino acercarnos para ayudarlas pero apoyadas con el conocimiento y la información que necesitan para canalizarlas a la institución médica adecuada y aliviar ese sufrimiento que las agobia”, dijo María Covernali, directora de la organización Familias Triunfadoras.
Covernali, quien también es directora del programa de Community Health Worker e instructora por el Estado de Texas, cuyo trabajo es certificar los estudios de alumnos y alumnas, ha validado a la fecha a más de 600 promotoras de la salud, quienes al graduar están preparadas para trabajar en las diferentes áreas de la promoción de la salud apoyadas por asociaciones que cuentan con los recursos y programas preventivos de salud para atender a las comunidades.
Para María su reto es ayudar a su comunidad de San Elizario llevándoles ropa, despensas, zapatos así como canalizarlas para la solución de problemas de abuso sexual y violencia doméstica, además de la educación en la prevención de la salud dentro de un entorno familiar para aumentar la conciencia de que la salud es lo primero.
Rita Sardaryzadeh, comunicóloga y asistente de enfermera cuenta con una maestría en Salud Pública y además es instructora del programa de Community Health Worker y Resucitación Cardiopulmonar (CPR) lo que le ha permitido participar en programas de investigación de salud. Tiene la tarea de actualizar los temas del programa de Community Health Worker.
“El objetivo es siempre estar enfocadas en mantener comunidades saludables con la finalidad de influir y motivar a las promotoras para que ellas a su vez influyan en las diversas poblaciones asentadas en los condados de El Paso, Texas, y Doña Ana, en Nuevo México, en temas de salud y de esta manera superar las barreras culturales que dificultan el acceso a los servicios de la salud”, comentó.
Por su parte Cristina Ramos, quien es parte de Community Health Worker, actualmente se encuentra cursando una certificación de Holistic Health Coach. Su experiencia en la promoción y desarrollo de temas de la salud le ha permitido actualmente promover el tema de planificación familiar, salud sexual y reproductiva y es el enlace comunitario con personal de una clínica móvil.
A decir de ellas y, considerando los aspectos de origen, cultura y religión, coinciden que son sumamente importantes para lograr las metas y éxito de cada uno de los programas que se llevan en las comunidades como la que se realiza en San Elizario, ubicado en el Valle Bajo, donde la meta es promover buenos hábitos para mejorar la esperanza de vida y prevenir enfermedades crónicas.
“A través de visitas programadas o la atención que reciben en las ferias de la salud hemos logrado atender a cientos de familias y canalizado a las diferentes agencias médicas para que reciban su tratamiento así como la orientación que requieran para la tramitación de un documento oficial ante una dependencia de Gobierno o privada”.
Asimismo Myra Rodríguez, quien es enfermera vocacional, instructora de primeros auxilios y especialista en técnicas en salud mental, desarrolla la habilidad de llegar a las comunidades por medio de la coordinación y asistencia de diferentes recursos que se pueden llevar a la sociedad gracias a su formación como promotora de salud.
Ella, al igual que sus compañeras, ha trabajado en diferentes temas de investigación como infecciones por Helicobacter Pylori Bacteria, el Virus del Nilo, VIH/SIDA, enfermedades de transmisión sexual y actualmente trabaja en la educación e investigación del plomo en la sangre entre la comunidad infantil en El Paso.
Su experiencia la ha llevado a crear un impacto dentro de la comunidad paseña creando confianza en los resultados de investigación “porque eso permite dar una credibilidad y confianza en los nuevos programas preventivos de salud”, dijo Covernali.
Para Rita, Cristina y Myra la promoción, educación y difusión de la salud no es un pasatiempo, sino es su “razón de ser”; su ejemplo de experiencia y ejemplo a seguir es María Covernali, considerada como una mujer sensible, “que todo lo que hace por su comunidad va más allá de la obligación que se basa en la experiencia. Es una mujer que se basa en una gran “convicción” de que la promoción de la salud es la única manera de garantizar la salud de todas las comunidades vulnerables”, expresó Rita Sardaryzadeh.
No obstante la emergencia sanitaria que se vive en el mundo y, la cual ha pegado duro al Condado de El Paso, estas mujeres no se detienen en la atención de las comunidades vulnerables y prestan el servicio requerido tomando las precauciones que exigen los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC).