Jefes de fiscales federales, en su mayoría blancos
La composición racial del país no se ve reflejada en los titulares de los departamentos, aseguran
La composición racial de los jefes de las oficinas de fiscales federales fue menos diversa bajo la presidencia de Donald Trump que bajo la de sus tres predecesores, por lo que hombres abrumadoramente blancos están a cargo en momentos de grandes tensiones raciales y cuestionamientos del sistema judicial.
La Associated Press analizó informes del Gobierno de casi tres décadas y comprobó que la falta de diversidad alcanzó su punto máximo en el Gobierno de Trump. El 85% de los fiscales confirmados por el Senado bajo su Gobierno son blancos, de acuerdo con el análisis de la AP, comparado con el 58% nombrados en los ocho años de Gobierno de Barack Obama, el 73% de los dos mandatos de George W. Bush y el 63% del Gobierno de Bill Clinton.
Individuos blancos encabezan 79 de las 93 oficinas de fiscales federales en un país en el que los blancos representan menos de un tercio de la población. Nueve fiscales son mujeres, dos afroamericanos y dos hispanos.
Los fiscales federales pueden tener un profundo impacto en el sistema de justicia penal y su liderazgo ejerce una enorme influencia. Si no hay diversidad, puede haber prejuicios que nadie nota en las decisiones acerca de los cargos a presentar y en las recomendaciones de sentencias, haciéndole perder legitimidad a todo el sistema.
El persistente desequilibrio genera un enorme contraste entre los fiscales, la gente a la que sirven y la población carcelaria, con un porcentaje desproporcionado de reos afroamericanos.
“El departamento no valora la diversidad en su conducción y no se toman las mejores decisiones cuando no se escuchan todas las voces”, expresó Kenneth Polite Jr., quien fue fiscal federal en Nueva Orleáns bajo el segundo Gobierno de Obama.
La brecha es particularmente relevante en una era en la que las autoridades estatales y municipales son cuestionadas constantemente por no juzgar a policías que han matado a afroamericanos. Los fiscales federales pueden servir como muro de contención en esos casos radicando ellos cargos federales.
El hecho de que no se contraten fiscales que reflejen la composición racial del país aumenta la desconfianza de comunidades frustradas con la decisión del Departamento de Justicia de no investigar las prácticas policiales y con el secretario de justicia William Barr por haber descartado la idea de que en la policía haya un racismo sistémico.
El portavoz de la Casa Blanca Judd Deere dijo en un comunicado que el Gobierno “trabajó estrechamente con los senadores para identificar los mejores candidatos para dirigir las fiscalías de sus distritos”.
Ex fiscales dicen que los prejuicios pueden incidir en las decisiones si no hay un grupo variado considerando los casos. Es lo que Danny Williams Sr. vivió un año después de ser nombrado jefe de la oficina de Oklahoma en el 2012.