Catea FBI casa vacacional de Biden
Esta vez no encontraron archivos clasificados, pero incautaron notas escritas por el presidente
Washington— El FBI registró ayer miércoles la casa de vacaciones del presidente Joe Biden en Rehoboth Beach, Delaware, sin encontrar ningún documento clasificado, el último giro de una extraordinaria serie de cateos en sus propiedades y las de su predecesor.
Los agentes tomaron algunas notas escritas a mano y otros materiales relacionados con el tiempo de Biden como vicepresidente para su revisión, tal como lo habían hecho cuando registraron su casa en Wilmington el mes pasado, donde también encontraron artículos clasificados. Los investigadores registraron su antigua oficina en un centro de estudios de Washington que lleva su nombre en noviembre, pero no está claro si se llevaron algo.
Las búsquedas de Biden, realizadas con su bendición, se produjeronmientras los investigadores trabajan para determinar cómo la información clasificada de su época como senador y vicepresidente terminó en su casa y su antigua oficina, y si algún mal manejo involucró una intención criminal o fue simplemente un error en una ciudad donde no es inaudito el tratamiento no autorizado de archivos secretos.
Los cateos de propiedades por parte de las fuerzas del orden son una parte rutinaria de las investigaciones criminales, pero no hay nada ordinario en que el FBI registre la casa de un presidente en ejercicio, incluso cuando Biden y sus ayudantes han tratado de contrastar sus acciones con las de su predecesor.
El ex presidente Donald Trump se enfrenta a una investigación penal de un abogado especial sobre su retención de varios cientos de documentos clasificados y otros registros gubernamentales en su propiedad de Mara-lago en Florida, y su resistencia a entregarlos, lo que condujo a una orden del FBI y una búsqueda nocturna para apoderarse de ellos en agosto pasado.
El miércoles, el abogado personal de Biden, Bob Bauer, dijo que agentes del FBI autorizados por el Departamento de Justicia (DOJ) pasaron tres horas y media registrando la casa de playa del presidente y que “no se encontraron documentos con marcas clasificadas”.
En un comunicado que revela la búsqueda, Bauer buscó retratar al mandatario y su equipo como totalmente transparentes y cooperativos. Describió la investigación como “planificada” y “un paso más en un proceso exhaustivo y oportuno del DOJ que continuaremos apoyando y facilitando por completo”.
No mencionó a Trump por su nombre, pero la declaración parecía tener como objetivo yuxtaponer la investigación de Biden con el caso de Trump, donde meses de esfuerzos infructuosos del DOJ para recuperar todos los registros clasificados llevados al patrimonio del ex presidente en Florida culminaron en la orden de allanamiento de agosto y retiro de casi tres docenas de cajas de documentos y otros artículos.
Los registros de la antigua oficina de Biden y las casas de Delaware, por el contrario, se han realizado voluntariamente y sin una orden judicial. Pero el hecho de que el FBI hiciera su propia búsqueda reflejó la determinación del Departamento de Justicia de recuperar todos y cada uno de los elementos clasificados posibles en lugar de confiar en que dichos archivos habían sido localizados.
La búsqueda más reciente sigue el control de arriba a abajo de 13 horas del FBI en su casa de Wilmington, Delaware, donde los agentes localizaron documentos con marcas clasificadas de su época como vicepresidente y senador y también tomaron posesión de algunas de sus notas escritas a mano.
Búsqueda refleja la determinación del DOJ en recuperar todos documentos secretos