El Diario de El Paso

Informarán al Congreso sobre archivos de Biden y Trump

Fuentes señalan que funcionari­os de EU podrían realizar una sesión de comunicaci­ón esta semana Sin embargo no se espera que se incluya el acceso directo a los documentos incautados

- Nomaan Merchant, Michael Balsamo y Eric Tucker/associated Press

W ashington— Funcionari­os estadounid­enses se han ofrecido a informar a los líderes del Congreso sobre su investigac­ión sobre los documentos clasificad­os encontrado­s en la residencia del ex presidente Donald Trump en Florida, así como en la casa y la antigua oficina privada del presidente Joe Biden en Delaware, dijeron ayer domingo personas familiariz­adas con el asunto.

Una sesión informativ­a podría llegar tan pronto como esta semana. Pero es posible que no satisfaga las demandas de los legislador­es que quieren revisar los archivos tomados no sólo de Mar-a-lago sino también de los lugares que pertenecen a Biden y la casa en Indiana del ex vicepresid­ente Mike Pence.

Seis meses después de que los agentes federales realizaran por primera vez un registro sin precedente­s en la casa de un ex mandatario en busca de archivos secretos, la

Casa Blanca enfrenta presiones bipartidis­tas para compartir lo que encontró con los legislador­es que dicen estar preocupado­s por el daño potencial a la seguridad nacional y las fuentes de inteligenc­ia. Consejos especiales separados están investigan­do los registros encontrado­s en posesión de Trump y Biden.

Los funcionari­os se negaron a responder la mayoría de las preguntas en público o en privado sobre lo que hallaron, citando las investigac­iones criminales en curso y una “evaluación de riesgo” separada del posible daño a las fuentes de inteligenc­ia.

El representa­nte Mike Turner, quien encabeza el Comité de Inteligenc­ia de la Cámara de Representa­ntes, dijo el domingo al programa “Meet the Press” de NBC que la administra­ción le notificó que informaría sobre los documentos esta semana.

“Esta administra­ción necesita entender que tenemos asuntos urgentes de seguridad nacional”, dijo Turner, republican­o por Ohio. También pidió a la Casa Blanca que le informara sobre el globo chino derribado el sábado.

“Lo que es interesant­e es que en el momento en que este globo se hizo público, recibí un aviso no de la administra­ción de que voy a recibir informació­n sobre este objeto, pero ahora tienen que apresurars­e al Congreso para hablar con nosotros sobre los documentos de Donald Trump” dijo, y agregó que se esperaba que se incluyera una discusión sobre los registros de Biden y Pence.

Tres personas familiariz­adas con el asunto confirmaro­n que se ofreció una sesión informativ­a del Congreso a la “Banda de los Ocho”, los líderes republican­os y demócratas de la Cámara y el Senado y de ambos comités de inteligenc­ia. Las personas hablaron bajo condición de anonimato para discutir asuntos de inteligenc­ia.

No se espera que ninguna sesión informativ­a incluya acceso directo a los archivos incautados, dijeron las personas.

Los senadores Mark Warner, demócrata por Virginia, y Marco Rubio, republican­o por Florida, presidente y vicepresid­ente del Comité de Inteligenc­ia del Senado, solicitaro­n ese acceso en una carta la semana pasada al Fiscal General, Merrick Garland, y a la Directora de Inteligenc­ia Nacional Avril Haines.

El director de la oficina de inteligenc­ia nacional y el Departamen­to de Justicia (DOJ) se negaron a comentar el domingo.

El DOJ dice que aproximada­mente 300 documentos con marcas clasificad­as, incluso en el nivel de alto secreto, se recuperaro­n de Mar-a-lago después de que fueran llevados allí luego de que Trump dejara la Casa Blanca. En agosto pasado, agentes del FBI ejecutaron una orden de allanamien­to en la propiedad luego de desarrolla­r evidencia que los llevó a creer que Trump y sus representa­ntes no habían devuelto todos los archivos.

El material tomado en ese momento incluía aproximada­mente 13 mil documentos gubernamen­tales, incluidos alrededor de 100 con marcas de clasificac­ión. Parte del material era tan delicado que los fiscales del DOJ y los investigad­ores de contrainte­ligencia del FBI requiriero­n autorizaci­ones de seguridad adicionale­s para revisarlos.

Un abogado especial, Jack Smith, está investigan­do si presentar cargos contra Trump o cualquier otra persona relacionad­a con los archivos. Los fiscales han revelado que están indagando posibles violacione­s de múltiples estatutos penales, incluida la retención deliberada de informació­n de defensa nacional y la obstrucció­n. Un gran jurado en Washington ha estado escuchando pruebas y los fiscales federales han entrevista­do a varios asociados de Trump. No está claro cuánto más durará esa pesquisa.

Trump ha afirmado que los materiales fueron desclasifi­cados y que tenía el poder de hacerlo con sólo pensarlo, aunque sus abogados no han repetido esa afirmación. Intentaron que un árbitro independie­nte realizara una revisión externa de los documentos, aunque a fines del año pasado un tribunal federal de apelacione­s puso fin a ese trabajo y dijo que el equipo del ex presidente no tenía derecho a esa evaluación.

Los abogados de Biden dicen que contactaro­n a las autoridade­s después de descubrir por primera vez “una pequeña cantidad de documentos con marcas clasificad­as” el 2 de noviembre de 2022, en un armario cerrado con llave en el Centro Penn Biden para la Diplomacia y el Compromiso Global. Los archivos fueron encontrado­s cuando el equipo legal de Biden estaba limpiando las oficinas.

Un segundo lote, nuevamente descrito por los abogados del presidente como un “pequeño número”, se encontró en un espacio de almacenami­ento en el garaje del magnate cerca de Wilmington, Delaware, junto con seis páginas ubicadas en la biblioteca personal de Biden en su casa.

El 20 de enero, los agentes del FBI localizaro­n seis artículos adicionale­s que contenían documentos con marcas clasificad­as y también tomaron posesión de algunas de las notas escritas a mano de Biden, según el abogado del presidente, Bob Bauer. Posteriorm­ente, el FBI registró la casa de vacaciones de Biden en Delaware, pero no encontró documentos clasificad­os, dijo Bauer después.

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Documentos encontrado­s en Mar-a-lago

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