Trump y votantes de minorías: ¿qué avances hay hasta ahora?
Republicano prometió grandes planes para cambiar rumbo de afroamericanos y latinos Grupos ciudadanos son quizás el segmento más firme de la base demócrata, señalan
Nueva York– Donald Trump dice que quiere celebrar un importante evento de campaña en el Madison Square Garden de Nueva York en el que participarán artistas y atletas afroamericanos de hip-hop. Sus asesores hablan de que Trump hará apariciones en Chicago, Detroit y Atlanta con líderes de color y realineará la política estadounidense cambiando los distritos electorales demócratas.
Pero cinco meses antes de que se emitan los primeros votos en las elecciones generales, la campaña del ex presidente tiene poca organización aparente que mostrar para sus ambiciosos planes.
Su campaña eliminó a su persona clave para las coaliciones y no ha anunciado un reemplazo. Las oficinas de contacto con las minorías del Partido Republicano en todo el país han sido cerradas y reemplazadas por negocios que incluyen una tienda de cambio de cheques, una heladería y una tienda de juguetes sexuales. Los funcionarios de campaña reconocen que faltan semanas para implementar programas específicos.
El presunto candidato presidencial republicano ha luchado por navegar una transición complicada hacia las elecciones de noviembre, plagada de problemas de personal, problemas legales personales y el desdén del movimiento “Make America Great Again” por la “política de identidad”. Hay signos de frustración sobre el terreno, donde los republicanos creen que Trump tiene una oportunidad real de reducir las ventajas del presidente demócrata Joe Biden entre los votantes de color.
“Para ser honesto, el Partido Republicano no tiene un plan de participación coherente para las comunidades afroamericanas”, dijo Darrell Scott, un pastor afroamericano y antiguo aliado de Trump que cofundó la Coalición Nacional por la Diversidad para Trump en 2016. “Lo que tiene son conservadores en comunidades de color que se han encargado de encabezar nuestras propias iniciativas”.
La organización sobre el terreno ha sido durante mucho tiempo un sello distintivo de las campañas presidenciales exitosas, que normalmente invierten enormes recursos en identificar a los posibles partidarios y garantizar que voten. La tarea puede ser aún más crítica este otoño, dado que pocos votantes están entusiasmados con la revancha entre Biden y Trump.
Sin establecer contacto
Pero en Michigan, un estado fundamental que pasó de Trump a Biden hace cuatro años, varios funcionarios del partido confirmaron que el Comité Nacional Republicano, reformado por los aliados de Trump después de que éste consiguiera la nominación en marzo, aún no ha establecido centros comunitarios para llegar a las minorías. Los miembros de la comunidad han ofrecido espacios de oficina para albergar los centros, pero la dotación de personal ha sido un problema, dijo el presidente del Partido Republicano del condado de Oakland, Vance Patrick.
“Tenemos todos estos carros pero todavía no tenemos caballos”, dijo Patrick. “Por lo tanto, se trata de asegurarnos de que tengamos personal cuando abramos estas oficinas”.
En el condado de Wayne, hogar de Detroit, los funcionarios republicanos locales dicen que están tratando de resolverlo por sí mismos.
“Soy yo quien organiza eventos o la gente simplemente se acerca a mí”, dijo Rola Makki, vicepresidenta de extensión del Partido Republicano de Michigan, y señaló que no ha visto ningún centro de extensión para minorías abierto a pesar de que la campaña nacional de Trump afirma lo contrario.
En los últimos años, el RNC invirtió mucho en centros comunitarios y extensión a las minorías basándose en la creencia de que las relaciones reales con los votantes, incluso aquellos que normalmente no apoyan a los republicanos, marcarían la diferencia el día de las elecciones. Sin embargo, desde que asumió el control del Comité Nacional Republicano en la primavera, el equipo de Trump ha reducido drásticamente esos esfuerzos.
“Tradicionalmente, los republicanos no han sido eficaces en sus esfuerzos por persuadir a los votantes afroamericanos e hispanos de que voten por nuestro partido”, dijo Lynne Patton, asesora principal de campaña que supervisa el trabajo de las coaliciones y que ha trabajado estrechamente con la familia Trump durante décadas. “Pero esta es otra razón más por la que el presidente Trump insistió en que su equipo de liderazgo cuidadosamente elegido asumiera el control del Comité Nacional Republicano y encabezara un esfuerzo unificado para aceptar la deserción histórica que se está presenciando dentro de las comunidades afroamericanas e hispanas del Partido Demócrata y garantizar que sea permanente”.
Sin explicación ni reemplazo
La campaña contrató a un director de coaliciones nacionales en octubre pasado. Pero el empleado, Derek Silver, se fue en marzo sin explicación, según dos personas familiarizadas con el asunto que hablaron bajo condición de anonimato para compartir discusiones internas. Silver no respondió múltiples solicitudes de comentarios. No se ha anunciado ningún reemplazo.
Los asesores de Trump rechazan las críticas de que no están organizando o gastando lo suficiente para llegar a las minorías. James Blair, director político de la campaña, dijo que la campaña no “difundiría” sus niveles de gasto o de personal, “pero les aseguro que es suficiente para garantizar que el histórico aumento del apoyo al presidente Trump entre los votantes afroamericanos e hispanos se mantenga en noviembre y más allá”.
Patton dijo que el equipo político de Trump está sentando las bases para un sólido programa de extensión a las minorías, aunque en gran medida en privado.
“Estamos hablando con líderes afroamericanos, estamos hablando con propietarios de pequeñas empresas, estamos hablando con atletas famosos, artistas de hiphop, algunos de los cuales creo que se sorprenderían si supieran quién está hablando con nosotros en este momento”, dijo Patton en una entrevista. “Estas son personas que están expresando su disposición a apoyar al presidente Trump tanto en público como en privado”.
Dijo que faltan semanas para que la campaña implemente programas específicos. El cronograma retrasado contrasta marcadamente con el acercamiento inicial durante la candidatura a la reelección de Trump en 2020. Comenzó sus esfuerzos de coalición, incluidos los programas “Latinos por Trump” y “Voces Afroamericanas por Trump”, en el verano y otoño de 2019, respectivamente.
El equipo de Trump insiste en que mejorará su posición entre los votantes de color, quizás el segmento más firme de la base demócrata, independientemente de la estrategia. Los asesores creen que la campaña tiene impulso tanto entre los afroamericanos como entre los hispanos, especialmente entre los hombres más jóvenes, y señalan que Trump ha demostrado que puede ganar a su manera, sin tener en cuenta las reglas tradicionales de la política.
Descontento
Las encuestas muestran que muchos adultos afroamericanos e hispanos están descontentos con Biden. Según encuestas de The Associated PRESS-NORC Center for Public Affairs Research, la aprobación de Biden entre los adultos afroamericanos ha caído del 94% cuando comenzó su mandato al 55% en marzo. Entre los adultos hispanos, cayó del 70% al 32% en el mismo período.
Una encuesta de abril realizada por el Pew Research Center confirma que el problema es especialmente grave entre los adultos más jóvenes. En esta encuesta, el 43% de los adultos afroamericanos menores de 50 años dijeron que aprueban a Biden, en comparación con el 70% de los mayores de 50 años. Entre los hispanos, el 29% de los adultos más jóvenes dijeron que lo aprueban, un poco menos que el 42% que dijo lo mismo entre los mayores de 50 años.
La estrategia de divulgación en desarrollo de la campaña de Trump se basa en utilizar su celebridad y personalidad grandilocuente para crear momentos virales en comunidades de color que sus asesores creen que tendrán más impacto que la organización de base o la publicidad paga por sí sola. Los asesores señalan las apariciones de Trump en un Chick-fil-a de Atlanta, una bodega de Nueva York y el velorio de un oficial de Policía de la Ciudad de Nueva York como ejemplos de la estrategia.
Sus aliados argumentan que una mayor frustración por el crimen, la inflación y la inmigración puede ganarse a algunos votantes de color que anteriormente han sido menos receptivos al historial y la retórica divisiva de Trump.
“Las comunidades de color no se inclinan hacia la derecha, se inclinan hacia Trump”, dijo Scott, el pastor y aliado cercano de Trump que está pidiendo al Comité Republicano que intensifique y reforme sus esfuerzos. Scott dijo que los votantes afroamericanos apoyan a los demócratas debido al largo alcance del partido hacia la comunidad, que el Partido Republicano no ha igualado, y dijo que las elecciones de 2024 presentan una oportunidad que el partido no debería desperdiciar. “Trump es el atractivo; Trump es el imán”.
Biden ha estado gastando millones de dólares en anuncios dirigidos a votantes afroamericanos y latinos en estados clave. A esto se suma la apertura de docenas de nuevas oficinas en barrios minoritarios. Mientras tanto, el equipo de Biden ha enviado con frecuencia a la vicepresidenta Kamala Harris, la primera vicepresidenta afroamericana del país, y a otros destacados líderes de color.
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Que Donald Trump y los republicanos del MAGA admitan con orgullo que no tienen una estrategia real para llegar a los votantes afroamericanos porque creen que todo lo que necesitan son conciertos de rap y pollo gratis solo es sorprendente si no se ha prestado atención a la relación fraudulenta de Trump con los afroamericanos durante años”
Jasmine Harris Directora de medios afroamericanos de la campaña de Biden
Datos
La campaña del presidente demócrata señala tasas de desempleo de minorías récord y políticas educativas como la financiación de colegios y universidades históricamente afroamericanos y la condonación de préstamos estudiantiles, así como la postura de Biden sobre la política de derechos civiles.
“Que Donald Trump y los republicanos del MAGA admitan con orgullo que no tienen una estrategia real para llegar a los votantes afroamericanos porque creen que todo lo que necesitan son conciertos de rap y pollo gratis solo es sorprendente si no se ha prestado atención a la relación fraudulenta de Trump con los afroamericanos durante años”, dijo Jasmine Harris, directora de medios afroamericanos de la campaña de Biden, quien describió a Trump como “un fraude” que “aprovecha cada oportunidad que tiene a su disposición para degradar a nuestra comunidad”.