Cómo ser buena pareja en tiempos difíciles
Consejos para permanecer conectados emocionalmente en casos de duelo, enfermedad, mala situación financiera, etc
La muerte de un ser querido, el nacimiento de un bebé, una lesión o prolongada enfermedad, el desempleo, una mala ! - za obligatoria o el quedarse momentáneamente sin techo, son algunas de las situaciones que ponen a prueba la relación de cualquier pareja.
¿Cómo hacer para mantenerse unidos? Esta puede ser la pregunta que te estás haciendo en el caso de estar encarando cualquiera de esas situaciones transitorias que tanto alteran las relaciones.
Pues recientemente, los psicólogos del The Gottman Institute (TGI)—dedicado a efectuar investigaciones sobre el comportamiento de las parejas y cómo fortalecer las relaciones—ofrecieron estos cuatro consejos que ayudan a mantener a los cónyuges conectados afectuosa e íntimamente cuando sus mentes se encuentran preocupadas ante el estrés.
1. Programar un tiempo para compartir solos
Es común que en momentos de cambios o transiciones las rutinas y los horarios para compartir se vean alterados o interrumpidos y, ante ello, es importante que los cónyuges establezcan una tarde o noche para salir de la casa—con intensión y obligación personal— y sentirse por un par de horas libres de las tareas domésticas.
“Programar el tiempo de pareja fuera de su rutina normal es una oportunidad para conectarse entre sí”, aseguran los expertos de TGI. “Y de no estar acostumbrados a programar un tiempo para compartir a solas, se debe considerar hacerlo por lo menos durante la temporada de la transición”.
Este tiempo, explican los expertos, se debe utilizar lo mejor posible para conectarse como pareja, ya sea haciendo el amor fuera de casa, yendo a cenar o al gimnasio o efectuando cualquier otra actividad que ambos disfrutan.
2. Cubrir las responsabilidades del otro
Cuando un integrante de la pareja se encuentra, por ejemplo, adaptándose a un nuevo trabajo, este puede llegar a sentirse estresado y ante la situación no estará presente al 100% para compartir con su media naranja. También puede que el tiempo que tenía para realizar los quehaceres bajo su responsabilidad se vea alterado y esto provoque un distanciamiento en la pareja.
Para prevenirlo, se recomienda que la pareja tenga una conversación en la cual ambos se pongan de acuerdo en qué roles van a cambiar temporalmente para apoyarse el uno al otro y suplirse mutuamente sus necesidades.
3. Mantener las costumbres ya existentes o crear nuevas
Las acciones de afecto son e x t r e mada mente f u ndamentales en los momentos de transición para mantener a la pareja conectada y unida. Es así que el hábito de besarse y abrazarse no se debe perder ante la situación de estrés, falta de tiempo, duelo o cansancio ante las actividades demandantes que requiere, por ejemplo, el cuidar de un enfermo. Pero en vez de eliminarlas, se deben más bien incrementar o crear nuevos rituales de afecto entre la pareja.
Detalles tan sencillos como prepararle una cena sorpresa al cónyuge que emocionalmente se encuentra afectado o dejarle una nota de amor, sacar tiempo para ejecutar sus quehaceres, sacarlo a pasear, alquilar su película preferida para verla juntos… Son detalles pequeños que generan grandes recompensas emocionales en la persona que, en un momento determinado, más lo necesita dentro de la relación.
4. Ser capaces de pedir perdón
Es normal que los integrantes de una pareja que se encuentra afrontando cualquier cambio en su estilo de vida se sientan más sensibles e irritables y esto se presta a que tengan choques con mayor frecuencia que de costumbre o lleguen a decirse cosas hirientes.
Para evitar esto es importante que los cónyuges tomen conciencia de que están pasando un periodo de mucho cansancio, dolor, frustración o estrés que los pone súbitamente explosivos ante cualquier palabra, acción o evento.
A l tomar conciencia de ello, por inercia, las parejas que se quieren y desean mantenerse fuertes en su relación tendrán que aprender a tener más cuidado de lo que hacen o dicen y, sobre todo, a usar con mayor frecuencia la palabra “perdón”.
Y es que como explican los expertos, el saber decir perdón a tiempo, con toda humildad y de buen corazón, no siembra heridas ni rencores.