El maridaje de Lima para alimentar el cuerpo y el alma
La capital peruana ofrece una amplia propuesta cultural y gastronómica
Fernando Gimeno/EFE
La cocina peruana encumbró a Lima como capital gastronómica de América Latina, pero la Ciudad de los Reyes acompaña su soberbia comida con una amplia propuesta cultural, poco conocida por sus visitantes extranjeros, que se encuentran con un maridaje completo para alimentar el cuerpo, pero también el alma.
Con esa receta, la capital peruana busca multiplicar su creciente turismo de congresos y reuniones y también quiere dejar de ser un lugar de paso para quienes llegan # antes a Cuzco para ver Machu Picchu.
En Lima se puede encontrar una de las mayores concentraciones de restaurantes de alta cocina de la región, como para quedarse varios días saboreando sus crea-
La gastronomía peruana se ha ganado un espacio a nivel internacional. En la foto, el chef Virgilio Martínez prepara uno de los platos en su restaurante Central.
ciones.
Allí está Astrid y Gastón, dentro de la señorial y palaciega Casa Moreyra, “la Meca” del “boom” de la alta cocina peruana, desde cuyos fogones el reputado chef Gastón Acurio lanzó la gastronomía de Perú a los ojos del mundo.
Muy cerca están otros destacados restaurantes como Malabar, de Pedro Miguel = $ 9 > @ O U @ # X > & U Z 9 [ > \+]^ Bistro, del joven chef Palmiro Ocampo, líder de una nueva hornada de cocineros denominada “Generación con causa”, concienciados con una cocina sostenible.
“Somos parecidos pero te- nemos cosas muy distintas. Para diferenciarnos hay que ser auténticos y buscar nuestra propia esencia”, comentó Ocampo.
Sin pasar por alto Central, de Virgilio Martínez, y Maido, de Mitsuharu Tsumura, cla quinto y octavo mejores restaurantes del mundo en el ránking de la revista británica Restaurant, existen otros lugares con una propuesta más tradicional en la que reúnen música, comida y mucha historia.
Es el caso de las peñas, locales donde los platos criollos se comen acompañados de la música interpretada por las guitar ras y los cajones peruanos.
Más íntimo es el restaurante de la huaca Pucllana, al costado de las ruinas de uno `++ - queológicos de las numerosas civilizaciones prehispánicas que habitaron estas tierras, y donde los incas solo fueron una de ellas.
Entre los restaurantes y las huacas están las calles, tabernas y parques que inspiraron las historias de los escritores más célebres de la literatura peruana como Mario Vargas Llosa, Julio Ramón Ribeyro o Alfredo Bryce Echenique, cuya riqueza literaria se puede apreciar en todo su esplendor en la Feria Internacional del Libro (FIL).