Piden la aprobación del “DREAM Act”
B@mariauxpen Más de un centenar de “dreamers” de 25 estados recorrieron ayer los pasillos del Capitolio para presionar al Congreso a que apruebe el “DREAM Act” de 2017, en víspera del plazo para la última renovación de los permisos de “DACA”.
Desde las escalinatas del edificio Longworth, los jóvenes explicaron a este diario que viajaron a Washington a hablar con los congresistas y sus asesores, en particular con los republicanos, porque el tiempo apremia, y se niegan a regresar “a la sombra” una vez que venzan sus permisos para el programa de “acción diferida” (DACA) de 2012.
Sobre todo, quieren contrarrestar la narrativa negativa en círculos conservadores de que no merecen la legalización, y trasladar el mensaje de que el sacrificio de sus padres –los originales “soñadores”no puede ser en vano.
La mayoría de los “dreamers” en esta gira, organizada por “FWD.Us”, tiene un diploma universitario, o carreras ya formadas en múltiples industrias.
¨Que escuchen nuestras historias”
“Queremos que los legisladores escuchen nuestras historias, que entiendan la urgencia de copatrocinar el ´Dream Act´. Acá hay congresistas que jamás han conocido en persona a un inmigrante indocumentado, a un ‘dreamer’, y esas voces son importantes en este debate”, dijo Tom Evangelista, de 27 años y cofundador del grupo “California Dreamers”.
“Vivimos con mucho temor, porque el gobierno tiene nuestra información, y no podemos regresar a la sombra, ya probamos nuestra parte del Sueño Americano… mi mamá falleció de cáncer, pero hizo muchos sacrificios para venir a EEUU, para que yo estudiara, y su sacrificio y el de otros padres no puede ser en vano”, afirmó.
Por su parte, Kimberly Galindo Díaz, de 24 años y graduada de la Universidad de California en Davis, afirmó que se trata de “un asunto muy personal”, porque es la única en su familia “sin papeles” y la primera en ir a la universidad.
“Quiero estudiar leyes, tengo
Marco Ortiz Sánchez
muchos planes. Mi mamá es residente, pero no he visto a mi papá en Tepatitlán en 15 años y quiero que venga; este problema tiene literalmente dividida a mi familia”, explicó.
Jornada de presión
Los “dreamers”, provenientes de 25 estados, se desplegaron a varias oficinas del Congreso para pedir la aprobación del “DREAM Act” de 2017, y entre ellos figuran maestros, ingenieros, empresarios, y estudiantes de facultades de medicina y ciencia, y de programas de licenciatura o posgrado.
Tres de los “dreamers” tenían previsto acompañar en una rueda de prensa a los coautores de la medida, el senador demócrata por Illinois, Dick Durbin, y su colega republicano de Carolina del Sur, Lindsey Graham.
La idea es que los legisladores puedan usarlos de ejemplos de casos de la vida real y explicar cómo los “dreamers” han contribuido a la economía y fortalecimiento del país.l