Una fiesta multitudinaria
En la ciudad de Windsor, a 34 kilómetros al oeste de Londres, banderas británicas decoran las calles que rodean el pintoresco castillo medieval, en cuya capilla, que lleva el nombre del patrón de Inglaterra, se celebrará hoy el enlace anglicano. La capilla gótica, en la que el príncipe Carlos se casó con Camilla en abril de 2005, está decorada con flores de temporada, y ramas de hayas y abedules, así como con rosas blancas. La boda, que empezará sobre las 11.00 GMT (hora de Londrés), estará a cargo del deán de Windsor, el reverendo David Conner, mientras que el arzobispo de Canterbury y primado de la Iglesia de Inglaterra, Justin Welby, casará a Enrique y Meghan cuando estos declaren sus votos matrimoniales ante una congregación de 600 personas.
Además, el primado de la Iglesia Episcopaliana de EE.UU., Michael Curry, que en 2015 se convirtió en el primer obispo afroamericano en presidir la Iglesia Episcopaliana, pronunciará un sermón.
El enlace durará una hora, tras lo cual los novios se subirán a una carroza abierta -un Ascot landau- para recorrer las calles de Windsor antes de pasear por Long Walk -la icónica avenida adornada a ambos lados por castaños plantados durante el reinado del rey Carlos II en 1680- para volver al castillo donde habrá una recepción en el suntuoso salón de San Jorge, utilizado para cenas de Estado./EFE