DESCUIDAN A LOS MENORES MIGRANTES
El gobierno federal es el responsable de la condición de las personas que tiene detenidas a su cargo. Este principio no se cumple adecuadamente con los indocumentados encerrados en la frontera. Mucho más grave es cuando la salud de los menores está en juego.
Desde hace décadas que no se producían muerte de menores de edad bajo custodia de las autoridades de inmigración. Ahora en el periodo de un año se reportaron seis casos. El aumento refleja el incremento de estos inmigrantes y la falta de preparación para recibirlos.
La Patrulla Fronteriza no está en condiciones para albergar, más de las 72 horas que debería tenerlos a su cargo. Mucho menos para vigilar el estado de salud de los menores. El Departamento de Seguridad Interna y el de Salud y Recursos Humanos -a cargo de la Oficina de Reubicación - no se ponen de acuerdo del por qué de la demora en el traslado.
Las condiciones en que están los menores son insalubres por sí mismo. El área de
las jaulas en donde duermen en el piso son conocidas como las congeladoras.
Allí la luz está prendida las 24 horas. La falta de jabón no ayuda a combatir los gérmenes. Se le quitan los remedios a los jóvenes cuando llegan. Hubo una epidemia gripe. Los enfermos fueron a parar a la “celda de la gripe” como la llaman los menores. Hay menores que cuidan a bebés.
Los médicos de hospitales adyacentes dicen que cuando le llevan niños enfermos llegan en condiciones que pudieron haberse evitado de haber sido detectados los síntomas en el tiempo adecuado. No está claro si son médicos o el personal de custodia los que toman esas decisiones.
Sí se sabe que las autoridades federales rechazan el ingreso de médicos independientes para verificar la condición y bienestar de niños y jóvenes. Es necesario que le den acceso inmediato a los médicos independientes para evaluar y realizar tratamiento de urgencia para los niños que lo necesiten. Al mismo tiempo, un experto de salud pública tiene que inspeccionar las facilidades para determinar que son seguras y sanitarias.
Finalmente, el viernes pasado la jueza federal Dolly Gee ordenó que se autorice el ingreso de expertos de salud para asegurar que los menores están detenidos en condiciones seguras, y salubres, además de evaluar la necesidades médicas de los menores. Buena decisión aunque no se instrumente de inmediato.
Hoy hay miles de menores en una situación vergonzosa para EEUU que debería levantar una indignación en su población. La doctora Dolly Lucio Sevier lo comparo con “sitios de tortura” en su reporte después de visitar un centro. Se dice que la moralidad de una sociedad se ve en cómo trata a los niños.s•